04/11/2019SALUD

Se llevó a cabo una jornada de prevención del Síndrome Urémico Hemolítico.

Fue el sábado en instalaciones del INTA organizada por la Mesa de Zoonosis.

El pasado sábado en horas de la mañana se cumplió con una interesante jornada de capacitación de sanidad alimentaria, específicamente vinculada a la prevención del Síndrome Urémico Hemolítico.

La jornada fue dictada por miembros de APRESUH, Asociación para la prevención del Síndrome Urémico Hemolítico, de la ciudad de Bahía Blanca la cual es una Asociación Civil sin fines de lucro integrada por familiares de pacientes, pacientes, profesionales de la salud, investigadores y personas interesadas en defender la lucha contra el SUH, haciendo conocer esta enfermedad que afecta principalmente a niños menores de 5 años pudiendo causar hasta la muerte del paciente o dejar secuelas para toda la vida.

En conferencia de prensa, la Dra. Soledad Firpo presentó a los disertantes de la ciudad de Bahía Blanca Miguel Caracciolo, fundador de APRESUH, y el médico veterinario Francisco Principe.

“La charla está destinada a la prevención y el conocimiento actual que existe sobre esta patología. Es una iniciativa de la Mesa de Zoonosis de Coronel Suárez en forma conjunta con el Rotary Club Coronel Suárez y la Secretaría de Salud Municipal porque es un tema absolutamente interesante”.

“Si bien el número de casos locales no es elevado, nosotros como médicos, principalmente los pediatras deben tener muy en cuenta esta patología, al igual que las familias en su prevención”, señaló la Dra. Firpo.

Al comenzar a referirse al Síndrome Urémico Hemolítico Miguel Caracciolo, fundador de APRESUH, señaló “Normalmente la bacteria cuando elimina la toxina ataca al riñón pero también puede atacar al intestino, al corazón o neurológicamente, es decir que cualquier órgano del cuerpo puede ser el afectado e incluso pueden ser varios a la vez”.

Entre la sintomatología de la enfermedad los disertantes señalaron fiebre, vómito y diarrea y sangre en las heces, entre otras.

“En líneas generales, cuando ataca al riñón que es lo típico, los primeros síntomas que se manifiestan es dejar de orinar. Cuando afecta a otros órganos pueden aparecer además vómitos y diarrea, los cuales pueden tener sangre. Al cabo de una semana, la persona puede tornarse débil e irritable”, agregó.

“El Síndrome Urémico Hemolítico es de difícil diagnóstico y ello hace que se demore la intervención, sumado a que es una enfermedad que no tiene medicación y de la que los médicos solo pueden aplicar medicación para aliviar el proceso que está pasando el paciente en ese momento”.

Al exponer factores preventivos, los miembros de APRESUH señalaron “por más redundante que fuere, la mejor prevención es la higiene. Está comprobado que en Argentina los dos años con menores índices de SUH fueron en 1995 en tiempos que se hizo la campaña del cólera que instaba masivamente a la población a extremar las medidas de higiene, y luego de ello, en 2009 con la gripe A también disminuyeron los casos porque la gente estaba muy concientizada en la higiene doméstica y el uso, por ejemplo, de alcohol en gel”.

En este sentido remarcaron además la utilización de “aguas seguras”, potables o con el debido tratamiento potabilizador, sumado a la correcta cocción de alimentos, la no interrupción de las cadenas de frío y la prevención de la “contaminación cruzada” que es aquella que se da al producirse el contacto de carnes crudas con otros alimentos, recomendando para ello la utilización de diferentes utensilios, tablas de cocina y trapos de limpieza a la hora de cocinar diferentes alimentos.

En conferencia de prensa explicaron que “este síndrome se da por contacto directo. La bacteria que produce esta infección se encuentra originalmente en reservorios animales, generalmente en los intestinos del ganado, a través de las deposiciones de éstos se puede contaminar el agua y las verduras”.

“Además la bacteria se trasmite por la manipulación de productos contaminados si no se cumplen las medidas de higiene de orden general. Si las hortalizas, el agua, las frutas y las manos están contaminadas también trasmiten la bacteria”.

En este sentido se señaló a modo de ejemplo “cuando se utiliza carne cruda para cocinar se recomienda el lavado de manos con agua y jabón antes de seguir manipulando otros alimentos crudos, como la lechuga. Además, si utiliza un cuchillo para cortar esa carne es conveniente que sea lavado antes de usarlo con otro alimento, dado que en estos actos puede ocurrir la contaminación”.

“Hay que extremar las precauciones en el mantenimiento de la cadena de frío en los alimentos que la necesitan, en el comercio y en el hogar.

Recordemos que la temporada de calor favorece la producción de estas enfermedades, puesto que la mayor temperatura ayuda a la reproducción de los gérmenes”.