El Arzobispo de la ciudad de Bahía Blanca Monseñor Carlos Azpiroz Costa presidió el sábado la consagración de laicos en la Parroquia Nuestra Señor del Carmen.

Tras presidir la santa misa que se ofició en la Parroquia Nuestra Sra. Del Carmen el arzobispo Azpiroz Costa impartió la consagración a Laura Dukardt, Tania Miranda, Carlos López, Maria del Carmen Rodríguez y Mabel Vera respectivamente en una emotiva ceremonia consagrándose a la orden seglar “Apóstoles de Jesús Sacramentado que responde a la Congregación de las Hermanas Obreras Catequistas de Jesús Sacramentado.

Quienes se consagraron el sábado por la mañana han tenido un período de formación de dos años, “pero ese proceso continuará. Nos encuentra frente a un compromiso, en una sociedad que necesita mucho el compromiso de los laicos, independientemente que nos consagremos o no. cada laico cristiano, debe dar testimonio en los diferentes lugares. No es fácil, estamos en un mundo complejo, que se ha vuelto muy indiferente a Dios”, señalaba antes de la ceremonia uno de los cinco laicos consagrados a quienes seguramente los espera una tarea compleja.

Laura Dukardt había señalado que “Esperemos que, con la ayuda de las hermanas, que son quienes nos impulsan, nos van a apoyar. Con la ayuda del Espíritu Santo, ojalá podamos llevar adelante esta tarea, lo más eficiente posible”.

Agradeció, la formación recibida por parte de la Hermana Liliana, a Gustavo Fernández, que es un laico consagrado, y al grupo de apóstoles que vino desde Mendoza para la ceremonia que con gran impacto emotivo se cumplió en nuestra Parroquia instando a rezar por los nuevos consagrados.

El Arzobispo Carlos Azpiroz Costa señalaba en su homilía que “Cada vez que veas expuesto a Jesús Vivo, Jesús Sacramentado, Santísimo Sacramento (cualquiera de los tres nombres está bien), te encuentras delante del propio Jesús, quien está ahí, esperando a que te acerques y le compartas todo lo que quieras. Recuerda que Él es tu mejor amigo; aquel que conoce tus más profundos secretos y que jamás te señalará, al contrario, sin importar las cosas, siempre te recibirá con los brazos abiertos para darte todo el amor que tiene en su corazón y ayudarte a cargar con cualquier problema que cargues sobre ti”.
La coordinadora de la ciudad de Mendoza Marina Reta encabezó la delegación que llegó de esa ciudad con laicos y religiosas participó de la ceremonia junto a la Madre Superiora de la Congregación Liliana Moyano y al ser entrevistada consideró que este acto representa “Un jubilo para la congregación y para la iglesia de tener nuevos laicos consagrados al servicio del Señor, lo que representa reafirmar todo nuestro compromiso del bautismo, poniéndolo al servicio de la iglesia, es decir, aquí estoy, poniendo toda nuestra voluntad enfrentándose con todas las realidades, un testigo de Cristo”.

La dirigente Marina Reta resaltó que “Con los años nos fuimos preparando, se crearon nuestras respectivas constituciones y a partir de allí seguimos el carisma de las hermanas” historiando la trayectoria de la congregación y sus laicos consagrados.

Por otra parte, y tras la despedida al Arzobispo que prontamente debía partir hacia Púan, se llevó a cabo un almuerzo de camaradería en la sede del Hogar La Providencia, donde se entregaron presentes recordatorios de esta jornada que se celebró el sábado pasado en nuestra ciudad donde Fray Carlos Azpiroz Costa señalaba que “Es una alegría venir nuevamente por estos motivos, es una fiesta linda, estos cinco laicos consagrados donde en su mundo y en su realidad, hay que tomar conciencia de esta vocación ser apóstol de Jesús con el carisma que las hermanas han plantado en Coronel Suarez sobre todo la adoración eucarística y la ayuda a los pobres que es el cuerpo de Cristo y esa sangre derramada”.

El Obispo resumió este rol señalando que “Es un mayor compromiso de los laicos, es bueno comunicar estas cosas, que no son noticias, es una obligación desde el bautismo; el bautismo nos llama a ser apóstol de Jesús y como dice el concilio, es consagrar las realidades del mundo, en el trabajo, en la fábrica, en la escuela, allí donde tienen puestas sus manos y su corazón en la vida, colaborar con el sacerdote, animando, ese es el clericalismo y venos que el laicado está sumando esfuerzos en su vida, tratando de llegar a fin de mes, con todas las dificultades de la vida, pero este es un mensaje eclesial para que el mensaje llegue a todos, por eso es muy bueno comunicarlo”, señaló el Arzobispo al ser entrevistado por La Nueva Radio Suarez y Cablevisión Noticias.

Fotos consagración: Juan Schtre.