Santiago Aliberti, un joven boxeador suarense con hambre de gloria y apoyo local

Santiago Aliberti es un nombre que empieza a sonar fuerte en el boxeo argentino. Con tan solo 76,200 kg y una categoría definida en los supermedianos, este joven pugilista suarense no solo se entrena con sacrificio y constancia en Buenos Aires, sino que además se mantiene enfocado en su sueño de llegar lejos en el mundo del deporte. En su paso por Coronel Suárez, Aliberti dialogó con La Nueva Radio Suárez sobre su presente, sus recientes peleas, su estilo y el apoyo fundamental que recibe de su entorno.
El boxeador volvió a visitar los estudios de la radio, acompañado por Luciano Rebolini, empresario local que decidió acompañar y sponsorear su carrera. “Estoy dando una mano dentro de lo que puedo, porque Santiago tiene condiciones, tiene hambre, y hay que apoyarlo. Nos representa muy bien y ojalá más gente se sume a ayudarlo”, expresó Rebolini. Además, destacó que en Coronel Suárez hay varios deportistas con gran proyección, como Máximo Peratz en atletismo o Solange Broto, quienes también cuentan con su apoyo.
Aliberti viene de obtener un importante triunfo en la Federación de Boxeo, en el barrio porteño de Almagro. Fue el sábado 19 de abril, luego de una inactividad de once meses. El rival original se bajó a último momento y lo enfrentó Néstor Fernández, un santafesino con buen físico y potencia. “La pelea empezó fuerte, lo aguanté, encontré el hueco y ahí lo definí. Una ráfaga al cuerpo, otra al rostro, lo hice retroceder y el árbitro paró la pelea”, relató.
El joven deportista entrena en el gimnasio Arena Coliseo de Mataderos, bajo la dirección técnica de Diego Hidalgo. Vive en Buenos Aires, lejos de su familia, se entrena a diario, da clases de boxeo y mantiene su forma física gracias al respaldo de sus sponsors. “No es fácil, pero me mantengo firme. Me ayudan Luciano, la gente de Luz Azul, Trufa Café, Arte Moderno, Pinturería Estanislao, entre otros. También puse a Dios por delante y me apoya mucho la gente que me rodea allá”, cuenta.
Su estilo se basa en la distancia, aprovechando su envergadura física, aunque también sabe meterse en el intercambio cuerpo a cuerpo si la pelea lo exige. “Si el rival se viene encima, hay que quemar las naves, sacar coraje y salir adelante”, explica con madurez.
Consultado sobre sus planes para el año, explicó que espera volver al ring en unos dos meses. “Me gustaría tener esa pelea pendiente con el paraguayo que se bajó, pero con quien sea. Me encantaría también pelear acá en Suárez, con mi gente, para devolver el apoyo de todos los que confían en mí”, aseguró.
Luciano Rebolini, por su parte, invitó a empresarios y vecinos a acercarse a apoyar a Santiago y a otros deportistas suarenses. “Esto es sacrificio puro. Hay que estar todos los días entrenando, comiendo bien, resistiendo. Hay que acompañarlos y sentirnos orgullosos de ellos”, remarcó.
Santiago Aliberti no solo se perfila como un gran boxeador, sino también como un ejemplo de perseverancia, humildad y compromiso. Y aunque sus pasos hoy lo lleven por los rings porteños, su corazón y sus raíces siguen bien firmes en Coronel Suárez.
¿Querés seguir su carrera? Podés encontrarlo en redes sociales como @santi.aliberti y sumarte a su camino con tu apoyo.