Rodrigo Bracamonte: “Vengo a la Biblioteca Parlante a pasar lindos momentos”
Es una persona joven, de la localidad de Huanguelén; hace unos pocos años atrás, a raíz de una diabetes y otras cuestiones, perdió la visión en sus dos ojos. Es un ejemplo de vitalidad, convicción, alegría y humor para transitar la vida.
En la semana aniversario de la Biblioteca Parlante, su concurrente más joven tal vez -porque inició su condición de usuario el año pasado, junto con la concurrencia al Servicio de Ciegos de la Escuela Especial-, dice que en esta institución que acaba de cumplir diez años de existencia, ha aprendido, “muchas cosas. Por ahí no puedo venir muchos a los talleres, debido a que soy de Huanguelén. Pero cada vez que puedo vengo, a acompañarlos y a charlar un rato, a pasar un lindo momento”.
Consultado en torno a si utiliza el sistema de escritura y lectura Braille, reconoce que lo sabe, pero no le gusta leer. “No me gusta, necesito mucha concentración. Después, ando bien”.
Desde hace unos meses, Rodrigo entrena con una bicicleta tándem, que conduce un amigo suyo, para una competencia que tendrá lugar en Guaminí, el primer fin de semana de diciembre. “Estamos entrenando a full”, cuenta, para esta competencia que tendrá desarrollo el 3 de diciembre. Es, un desafío que se ha impuesto con entusiasmo. Lo que espera que el día de la competencia, “sea un día lindo, porque estas últimas veces que hemos salido a entrenar, nos ha tocado un viento bastante importante”. Cuenta que su compañero, el que maneja, es una persona grande, por lo que tiene que hacer mucha fuerza, indefectiblemente. Lo que redunda, en un buen entrenamiento.
Agradece, “a todas las personas que siempre han estado, a las que están, a la gente de la Escuela 501, y a la gente de la Biblioteca, que siempre me han apoyado. Les tengo mucho aprecio. A mi familia y a mis amigos. A los que me critican, también les mando un saludo, porque creo que las críticas, todas, sirven para crecer”.