Roberto Olmedo explica cómo el Coaching Ontológico ayuda a ordenar pensamientos y transformar hábitos
Roberto Olmedo es coach ontológico y en diálogo con La Nueva Radio Suárez explicó en qué consiste esta práctica que cada vez gana más espacio entre quienes buscan herramientas para crecer, organizarse y alcanzar sus objetivos personales o profesionales.
Olmedo aclaró de entrada que “el Coaching Ontológico no es una ciencia ni está ligado a la psicología, sino que es una metodología”. Su objetivo es acompañar a las personas en un proceso de autoconocimiento y empoderamiento: “Lo que buscamos es que la persona se organice, se empodere y pueda cumplir con sus metas. Muchas veces se trata de ordenar pensamientos, porque la felicidad tiene mucho que ver con la calidad de lo que pensamos”.
La importancia de revisar nuestros pensamientos y hábitos
El coach explicó que “no vemos la realidad como es, sino como somos”, y que muchas veces los problemas crecen en nuestra mente más de lo que realmente son. “El problema se alimenta a través de los pensamientos. A veces no nos hacemos las preguntas correctas o evitamos responderlas porque no nos gusta lo que vamos a encontrar. Ahí es donde el coaching aparece como un espacio de acompañamiento con preguntas poderosas que ayudan a sacar a la luz lo que tenemos dentro”.
En ese sentido, Olmedo remarcó que gran parte de los impedimentos para avanzar en la vida están relacionados con los hábitos: “Son acciones repetidas que no analizamos y que muchas veces son el freno para alcanzar lo que queremos. La procrastinación, las excusas o culpar siempre a factores externos son mecanismos automáticos que debemos revisar para poder cambiar”.
Pasar a la acción
Uno de los puntos centrales que destacó es que el coaching no es mágico, sino un proceso: “Una sesión no alcanza para transformar todo. Como cuando uno va al gimnasio, no puede esperar resultados en la primera clase. Lo importante es pasar a la acción, sostener nuevos hábitos y hacerse cargo de lo que uno quiere lograr. Los resultados llegan en la medida en que trabajamos”.
Descubrir el propio potencial
Roberto Olmedo resumió el rol del coach como “un facilitador, alguien que ayuda a limpiar el espejo para que la persona pueda verse con claridad”. La idea es que cada uno pueda descubrir sus habilidades y redescubrir su potencial: “Todos tenemos capacidades, a veces más visibles y otras más ocultas, pero están ahí. Cuando tomamos conciencia de eso, nos damos cuenta de que somos seres transformables y capaces de lograr lo que queremos”.
Finalmente, dejó un mensaje inspirador: “Si no estoy conforme con quién soy, puedo ser mejor. Se trata de encontrar mi mejor versión y el coaching es una herramienta para acompañar ese camino”.