Fernando Tomsig: “Estamos entre los 10 países con más inflación del mundo al día de hoy”
Con el objetivo de realizar un análisis del presente, un estado de situación de la economía argentina, conversamos con el licenciado en Economía Fernando Tomsig, quien cuenta a su vez con un Posgrado en Administración de Negocios y experiencia docente en distintos niveles educativos. “Para poder entender dónde estamos hoy tenemos que analizar de dónde venimos y qué somos los argentinos al final, la parte más sociológica, más cultural”, indicó Tomsig en su introducción al tema.
Repasando conceptos claves para comprender la economía, Tomsig afirmó: “La inflación es la bandera número uno del presidente (o su obsesión) y en la inflación existen tres variables: la inflación, donde aumentan todos los precios; la deflación, donde baja el nivel general de precios; y lo que se llama estanflación, que es una cosa extremadamente rara, pasa poco pero mucho más a nosotros. La estanflación es un muy mal escenario que es cuando hay inflación, pero además hay caída del nivel de la actividad. Es un lugar horrible para ir y para estar”.
Haciendo un poco de historia, el licenciado sostuvo: “Nosotros venimos del año 2023, con el gobierno de Alberto Fernández, en una situación de estanflación. Es decir, una inflación de tasas del 10-12% mensual en los últimos meses del Gobierno y con una caída del Producto Bruto Interno de casi 2%. Mucho por la sequía también, dado que en el 2023 la actividad agropecuaria estuvo muy golpeada. En ese escenario de estanflación, también Alberto Fernández había dejado configurada lo que se llama una inflación pisada. Este concepto es muy importante en economía o más que nada en nuestro país, porque los gobiernos tienden a pisar la inflación”.
Una inflación reprimida supone que los precios de los servicios, los combustibles e incluso los alimentos no están sincerados, lo que implica que el Estado subsidie a las empresas para contener la suba de precios, con consecuencias como el alejamiento de los inversores. En síntesis, con una inflación pisada del 25 por ciento, un endeudamiento de 102 mil millones de dólares (que se suman a la deuda del país de 313 mil millones de dólares, llegando a un endeudamiento de los 415 mil millones de dólares) y con el PBI caído en un 2 por ciento, se configura la estanflación.
En las elecciones 2023, Javier Milei obtuvo el triunfo y para bajar la inflación se enfrenta a tres formas de hacerlo: “La que él toma, que es la clásica ortodoxa, implicó bajar el déficit fiscal licuando los salarios y sin control de precios. La inflación bajó rápido, pero con dolor social. Si ustedes se acuerdan el discurso del 10 de diciembre del año 2023, a espaldas del Congreso, devalúa inmediatamente, una devaluación que todos recordamos del 100%. Ni bien asume el gobierno, el dólar estaba a 400 pesos, Javier Milei lo llevó a 800 pesos. Se quitan los subsidios al gas, los jubilados fueron muy licuados, su salario en 2024 crece 160%, la inflación 180% y no es solo eso. Al jubilado antes, el PAMI le daba determinados servicios. Los medicamentos: tenía 3000 medicamentos que podía conseguir gratis, ahora solo tiene 2000. La obra pública la lleva básicamente a cero, ahorra dinero”.
“Durante el 2024, también en esta terapia de shock, se pierden 158.000 empleados asalariados, tanto del sector público como privado. los profesionales licuados, los comercios licuados. Entonces, el consumo también de supermercados en el 2024 cayó 8%, cae el consumo de la carne 9%, nosotros en Argentina comíamos asado los domingos, no lo comimos más, cae el consumo de yerba mate. Y el Producto Bruto Interno, que al final es lo que estamos hablando, cuál es la torta que tenemos para repartir entre los argentinos, cae 2% en el primer año de Javier Milei. Que era lo esperado, porque lo que estamos diciendo que el modelo clásico es yo destruyo los ingresos, enfrío la economía, bajo la inflación. Y yo hoy quiero recordar un número. El PIB cae 2% en el 2024, pero con un efecto rebote, que es una fortuna, de que en el 2023 había habido sequía, que afectó un punto y medio al PIB. Con lo cual, si en el 2024, como estuvo ese empuje, porque ahora no teníamos sequía en 2024, sin ese efecto, la caída del PIB hubiera sido de cerca del 4%. Lo cual es brutal, es un número brutal, es una motosierra de verdad. Solo para recordar también, en el año 2002, cuando Argentina sale la convertibilidad, todo el mundo recuerda que, en ese momento, no sé si también se acuerdan, volvimos al trueque. Se acuerdan que hacíamos trueque, o sea, habíamos vuelto a la economía de la edad media. Bueno, ahí la caída del PIB fue 10%. Ahora estamos hablando que en el 2024 cayó un 4%. O sea, es muchísimo, es lo que aplicó, es para lo cual la gente lo votó, esperando una recuperación”.
“Cuando Javier Miley hace su discurso, el 10 de diciembre de 2023, él dice que puede tardar entre 12 y 18 meses. No sé si lo acuerdan. Dijo que iba a ser duro, lo fue siendo, ¿qué pasó después de esos 12-18 meses? Ahí está. Bien, ya pasaron los 18 meses, La inflación sigue siendo entre el 2 y el 3%. En agosto la inflación va a estar cerca del 3%, nos va a llevar al 2025 con un 40% de inflación anual. Que yo quiero aclarar una cosa, 2% de inflación mensual, 3, es muchísimo. Incluso a nivel mundial entramos dentro de los 10 con más inflación. O sea, con todas estas consecuencias no tenemos una inflación de la cual estar orgullosos, porque la inflación que debiera ser del 2% anual es del 2-3% mensual. Estamos entre los 10 países con más inflación del mundo al día de hoy, de hecho, estamos sextos. El primer país es Venezuela, con 172% anual contra 40% nuestro. El segundo es Sudán, 113% anual contra 40% nuestro. El tercero es Zimbabue, 90% anual. El cuarto es Palestina, con 50% anual. El quinto es Burundí, con 45% anual. Y el sexto es Argentina, con 40% anual actualmente. Y nos sigue Irán con 38% y Turquía con 33%. Entonces no podemos estar contentos. Yo los países que acabo de nombrar son países que todos lo sabemos, que es una situación súper complicada, con conflictos armados, conflictos étnicos y guerras. A ese nivel estamos. Entonces yo quiero aclarar eso, no estamos orgullosos, estamos a nivel de inflación de países con conflictos armados súper importantes”.
“Llega el 2025, después seguimos con una inflación de niveles de países de conflicto armado, que no podemos estar orgullosos aún, y recordemos que la inflación promedio de Cristina Kirchner fue del 3%. Yo estoy tomando, acuérdense, inflación Congreso, no las del INDEC, porque el INDEC estuvo intervenido por Moreno. Yo miro la inflación Congreso de ese periodo antes del 2016, es 3%. Hoy estamos en el mismo 3. Inflación de Macri, promedio 4%, hoy estamos en 3. Inflación de la salida de la convertibilidad, Eduardo Duhalde, del año 2002, a pesar del peak del 10%, después fue 4. Entonces, no es que tenemos resuelta la inflación después de todo el dolor que hemos tenido. Y tomo un punto, seguimos con el tipo de cambio atrasado. Yo estoy seguro que ustedes tienen conocido que este año se fueron de vacaciones a Brasil. Eso no es normal. No hay países que, vos seas un empleado de comercio y me voy al exterior de vacaciones, no es normal. Pero si vos tenés el tipo de cambio atrasado, irte afuera es más barato. Nosotros en lo que va este año hemos gastado 9 mil millones de dólares como argentinos viajando al exterior, porque el tipo de cambio está atrasado y está barato viajar. La gente no va a mirar si perjudicamos las reservas del Banco Central en 9 mil millones de dólares. La gente, si tengo el precio barato, me voy. Recordemos que este año también, además de que no tenemos una inflación, tomamos un préstamo con el FMI de casi 20 mil millones de dólares. ¿Para qué? Para que vaya al Banco Central, intervenir el mercado del dólar y que el dólar esté planchado. ¿Para qué queremos que el dólar esté planchado? Para que no suban los precios de los productos importados. Este micrófono, este auricular, este saco, etc.”.
“Todo lo importado. Todo lo importado. Entonces estamos en un momento complejo porque no solo la inflación es la de orgullo, sino que además tenemos inflación reprimida, con lo cual después vamos a cerrar explicando qué va a pasar después de las elecciones. Siguen perdiéndose puestos de empleo. Durante el 2025 se perdieron 98 mil puestos de empleo más asalariados sobre los 158 mil puestos de empleo que ya se perdieron en el 2024”.
“No dejamos de ver una economía concentrada y sectores que crecen. No todos los sectores pierden con estas políticas económicas. Algunos crecen, como el financiero, ¿no? El financiero crece. De hecho, hay mucha gente sentada en Londres, en Nueva York, ganando 40% en dólares anual gracias a este tipo de cambio planchado, haciendo mucho dinero, consumiendo nuestras reservas con este efecto del carry trade. Entonces el sector financiero está de fiesta. El comercio está deprimido, los negocios siguen cerrando, las industrias siguen en mala actividad.
Consultado qué le parece que va a pasar, expresó: “Va a venir ahora una devaluación, va a venir más inflación post eleccionaria y el dólar va a tener que encontrar nuevamente su valor de equilibrio. ¿Qué creo que el presidente debiera atender un poco más? El presidente cree que la inflación es un efecto monetario exclusivamente, que controlando el déficit y sin emitirlo va a controlar. Y no es así. Hay dos factores más de mínima. Primero que tenemos estructuras monopólicas en Argentina. Por ejemplo, vos vas al supermercado, jabón para la ropa. ¿Vos qué compras? Skip o Ala. Skip o Ala es la misma empresa, es Unilever. Llega el fin de semana, te vas a tomar una cerveza con un amigo, consumís. O Quilmes, o Palermo, o Budweiser, o te gusta Corona, o te gusta Stella Artois, fantástico. La hace una sola empresa en Argentina que se llama Inbev. Por eso la cerveza en Argentina te cuesta tres dólares el litro, cuando en cualquier país cuesta un dólar. Entonces hay estructuras de mercado que Javier Miley tiene que romper. Ha habido algunas acciones tibias, pero tiene que romper esas estructuras de mercado, sino no va a bajar la inflación. De concentración de mercado. Y la segunda que Javier tiene que atender un poco más es la parte sociológica de la inflación. La inflación tiene una componente sociológica gigantesca y más en Argentina. Desayunamos viendo el dólar. La inflación sociológica es que la inflación afecta y es afectada por la sociedad. ¿Está bien? Entonces hasta que vos no atiendas esa parte, hasta que vos no generes confianza en tu plan, esto de Libra, Javier Milei promocionando un meme coin, fue innecesario. Yo ni voy a hablar de economía de corrupción, pero digo, de mínimo fue innecesario. Entonces me parece que el presidente debiera tomar más en cuenta las estructuras monopólicas y las sociológicas como componente de inflación” finalizó el licenciado en Economía Fernando Tomsig.