20/04/2021SALUD

“El bronceado es sinónimo de daño de la piel”

La médica esteticista Juliana Wagner reapareció en el aire de la 101.3, en su habitual segmento de los lunes, para profundizar en un tema que había quedado abierto la última semana: ¿cómo usar correctamente el protector solar y qué pasa con la exposición al sol?

En principio, Juliana Wagner explicó que “el protector solar debe formar parte de nuestra rutina de cuidado de la piel, los 365 días del año” e indicó que “es un mito que el protector solar sólo se utiliza en verano, o cuando se está expuesto al sol”. Al respecto aseguró que, en realidad, “debe utilizarse todos los días, aunque esté nublado o estemos dentro de nuestro lugar de trabajo” y agregó un dato a tener en cuenta, sobre todo hoy en día, que la virtualidad y el uso de las pantallas ha ganado parte de nuestra cotidianeidad: “generan foto envejecimiento, arrugas y manchas, y hacen que el proceso de envejecimiento sea mucho más acelerado”.

Consultada respecto a qué es lo que hay que tener en cuenta al momento de comprar un protector solar, Juliana Wagner detalló que son varias las cosas a mirar: “primero, la fecha de vencimiento, ya que suelen caducar en un año y hay gente que utiliza los que tiene de hace años atrás. Por otro lado, el factor de protección solar que tenga el producto, considerando que, para lo que es el rostro, siempre se recomienda factor treinta o más; y mirar que sea de amplio espectro, es decir, que proteja contra los rayos UVA y UVB”. En esa línea, especificó que también hay protectores “con alta tecnología, que brindan protección de la luz infrarroja, luz azul que emanan las luces de celulares y computadoras”.

Por otro lado, aclaró que “los protectores con color tienen la misma efectividad de aquellos que no lo tienen, y vienen formulaciones con ácido hialurónico e hidratantes”. Se trata de nuevos productos para todo tipo de piel, aunque sí debe utilizarse un protector que sea específicamente para el rostro, dado que “no se recomienda utilizar el corporal en la cara porque la piel del rostro es diferente a la del cuerpo, suele ser más sensible. La del cuerpo es muy pesada y podemos llegar a generar obstrucción de los poros e imperfecciones; y hoy por hoy vienen protectores libres de grasa y más livianos para el rostro” recomendó la Médica.

Por otro lado, detalló cuáles son los pasos de una rutina diaria de cuidado de la piel, aplicable a todas las personas y pieles: “los pasos para una rutina diaria son, primero, limpieza; después, alguna crema hidratante y para el contorno de ojos, y, por último, el protector solar”. A eso, agregó que, “aquellas personas que se maquillan lo deben hacer luego del protector”.

Tras esa aclaración, Juliana Wagner hizo una distinción entre tres productos que suelen generar confusión: bloqueador solar, protector y autobronceante. Al respecto, explicó que “el bloqueador es el que tiene factor cien y los autobronceantes se usan para dar color a la piel, que no está mal usarlos”. Incluso aseguró que, como profesional de la Salud, “antes que la exposición al sol o la cama solar voy a recomendar el autobronceante”.

Uno de los últimos puntos abordados por la profesional fue la necesidad de vitamina D, como “excusa” para exponerse constantemente al sol. Describió el tema como “controversial” y explicó: “no hay estudios que hayan demostrado que los bloqueadores solares causen una deficiencia de vitamina D, y si nos dejamos guiar por lo que dice la Asociación Argentina de Dermatología va a advertir que exponerse al sol específicamente para obtener más vitamina D no es buena elección, porque los beneficios que se obtienen de la vitamina van a quedar anulados por el aumento del riesgo de cáncer de piel. Y si escuchamos a la Sociedad Argentina de Endocrinología, va a decir que necesitamos exposición saludable, que consiste en exponerse sin protector solar, de diez a quince minutos, sólo tres veces a la semana. Con el rostro y cuero cabelludo protegidos”. 

Entonces, sobre ese punto, la Médica recomendó hacerlo en horarios prudentes, que no son los de mayor potencia solar, y con los cuidados antes mencionados, ya que, explicó, “la piel es el órgano que tiene mayor memoria y todo el daño solar que uno va teniendo a lo largo de la vida queda acumulado y guardado, y llega un momento en que se expresa, con manchas, arrugas y en el peor de los casos con otras lesiones de la piel, incluso con cáncer”.