Atención a comidas habituales y medicamentos humanos que a nuestras mascotas las intoxican
La veterinaria Gabriela Steinmetz habló, en un nuevo espacio de Salud y Bienestar, de lo que no pueden comer los perros y gatos: alimentos comunes que los humanos consumimos habitualmente, pero que para ellos son tóxicos. Además, ¿qué medicamentos de uso común son dañinos en las mascotas?
En principio, la profesional refirió al ibuprofeno, al diclofenac y al paracetamol diciendo, “para nosotros, son normales tenerlos y los usamos ante cualquier cosa -más allá de que la automedicación está contraindicada-, pero a ellos los intoxican”.
Al respecto, agregó: “Están prohibidos y si al perro le pasó algo, se golpeó, no le damos pastillas porque se mueren”. Steinmetz contó que, en su trayectoria profesional, ha tenido que atender casos de ese tipo y recordó: “No solamente le dan uno, sino que lo repiten a las ocho horas”.
Continuó su consejería haciendo hincapié en el no uso de medicamentos que son para humanos en mascotas: “Antes de darles algo, prefiero que me llamen a cualquier hora y me pregunten” resaltó la Veterinaria, aunque reconoció que “hay algunas medicaciones de humanos que se pueden utilizar si es una emergencia o situación puntual. Siempre preguntando y llevando al animal al consultorio”.
En ese punto, agregó que hay que tener mucho cuidado con el sertal compuesto y con la buscapina compuesta: “Pregunten siempre” insistió Gabriela Steinmetz.
Por otro lado, apuntó a hablar de las comidas, referenciando la cantidad de veces que comemos y les damos a nuestras mascotas las sobras o pedacitos de eso: “En primer lugar, el chocolate. Es tóxico para ellos. A nosotros nos despierta, nos da felicidad, nos hace liberar hormonas, pero para ellos es tóxico”.
En ese punto, aclaró que “en un perro grande los signos van a ser menores que en uno chiquito, pero evitemos las cosas evitables”.
Entre los síntomas clínicos de la intoxicación con chocolate, Steinmetz enlistó las arritmias cardíacas y la deshidratación, aunque aseguró que “pueden llegar a convulsión y muerte”.
Por otro lado, hizo mención de las semillas de la manzana y el carozo de la cereza o del durazno: “La manzana la pueden comer, pero no las semillas porque tienen cianuro. El carozo de la cereza o del durazno también y quizás, a nosotros no nos va a hacer nada, pero a ellos sí”.
Explicó que la diferencia es la metabolización de los productos: “Nosotros consumimos algo, nuestro cuerpo lo metaboliza y se transforma en distintos productos. Pero el perro y el gato tienen metabolizaciones distintas y, a veces, producen distintos productos de eso”.
En consecuencia, aclaró que pueden comer esas cosas, pero peladas y sin su centro.
Además, habló de las uvas y pasas de uva, dado que “pueden ocasionar falla renal”.
Apuntó a quienes puedan pensar en sus propias experiencias habiéndole dado a sus mascotas esos alimentos sin mayores consecuencias: “No pasa nada hasta que pasa, y, cuando pasa, no hay vuelta atrás” expresó la Veterinaria.
Hizo principal hincapié en la relevancia de considerar éstos tips para tenerlos siempre en cuenta y cuidar la salud de nuestras mascotas.
Por lo tanto, agregó a la lista las nueces y almendras, adjudicando que “tienen aceites que les pueden producir pancreatitis”. Si bien al perro -dijo Steinmetz- “le encanta comer las nueces, puede hacerles muy mal. Las pancreatitis son bastante más graves que un ataque al hígado”. En ese sentido fue que la Veterinaria recordó que “nada de huesos ni sobras con grasa”. Lo mismo ocurre con la palta, consecuencia de los aceites que tiene que, para los humanos, son saludables.
También es importante recordar que no deben comer nada de dulces por su toxicidad: “Nada de caramelos sin azúcar. Los animales sufren de diabetes como los humanos, y ese es un problema”. Ni hablar de las salsas que pueden llegar a generar anemias hemolíticas, “porque tienen un compuesto que, al ellos digerirlos, les rompen los glóbulos rojos”.
Concluyentemente, Gabriela Steinmetz reflexionó: “Son alimentos muy incorporados en nuestra vida cotidiana, que compartimos con ellos todo el tiempo, pero son con los que nunca pasa nada hasta que pasa”.
En esa línea, aconsejó que, si quieren alimentar de forma más natural a las mascotas, lo hagan del modo más sano posible: “Siempre hay que tener ésta lista para recordar qué es lo que no se puede”.