Lulo Hoffman, el hermano de Sergio Denis, estuvo en la fiesta en San José, y contó anécdotas muy emocionantes de la niñez y la juventud del cantante
San José fue el pueblo natal de los abuelos de Sergio Denis; también de sus padres, porque los dos nacieron en pueblo San José, de manera que Héctor Omar (Sergio Denis), Lulo y Nora (los dos hermanos del cantante), tuvieron en este lugar tardes preciosas en la niñez, la adolescencia y la juventud.
Lulo estuvo ayer en pueblo San José. Nora, recién operada, no pudo estar, pero lo llamó a su hermano cuando salía de Suárez para preguntarle si iba a la fiesta.
“Está muy en nuestra sangre, esto. Yo he venido de chico acá a pasar las fiestas. Donde estaba la casa de mi bisabuelo, veníamos siempre. Yo quería venir del campo para acá, y no que me llevaron a Suárez. Nos encantaba este lugar. Sin haber nacido acá, lo hemos vivido”.
Actualmente se encuentran con los primos. Y recuerda: “Para las kerb acá; las Pascuas acá también, en la casa del abuelo -en la calle Coronel Pringles, al lado de la plaza Sergio Denis, hoy un terreno baldío-; ahí era, el lugar de reunión. Mis abuelos venían del campo y en las Pascuas, todos acá. Para nosotros, fue una infancia hermosa”.
Cuanta que “en épocas anteriores, cuando había tanta pica entre Suárez y las colonias, los muchachos de Suárez tenían problemas en los bailes, nosotros con el Negro (Sergio Denis), nunca, porque teníamos identidad alemana. Nunca tuvimos problemas con los muchachos de acá”, relata entre risas.
Todos los recuerdos de infancia, adolescencia, juventud y vida adulta, todos, dice, están compartidos con su hermano, al que nombra con el apodo conocido entre familiares y amigos, el “Negro”.
“Yo no estuve con el Negro, solamente desde el ´69 al ´73, nada más. Salvo en esos años, siempre juntos. Hemos hecho todo, juntos. De chicos cantábamos folklore. Con Ricardo Polla, un amigo en común, hacíamos todo juntos. Es más, con Ricardo estuvimos representándolo al Negro en la primera parte de su carrera en Buenos Aires”.
Recuerda que cuando se produjo el accidente, que meses después terminaría costándole la vida, fue la única vez que no estuvo a su lado, porque un tratamiento médico lo había retenido a Lulo en Buenos Aires.
Recuerda las reuniones de primos en el Balneario Samuel Davies. “El último asado que comimos ahí, éramos 75, pero faltaron 55 primos. Solamente de la familia de mamá, los Fenzel. Somos un batallón, 34 primos hermanos, así que imagínense lo que eran las reuniones”.
Por supuesto que lo extraña, a su hermano Sergio: “Siempre”, dice, a la par que destaca la ambigüedad, porque hoy, “disfruto estar; hoy, puedo estar. Pero, por otro lado, no hay noche que no sueñe que estoy organizando algo, y que le digo, ´Vení que tenés que subir el escenario´. Fue toda una vida con él. Fueron 43 años estando al lado de él”, dice Lulo Hoffman, el hermano del queridísimo Sergio Denis.