03/03/2023PRODUCCION

“Hoy es el día, después que nos costó tanto” y “que se vaya contagiando la gente, que cada vez seamos más tratando de cuidar al medio ambiente”

Estas fueron las expresiones de Javier y Cristian Haack, y de Cecilio de Souza, los emprendedores que pusieron en marcha la planta de producción de energía eléctrica a través de biogás.  

“Esto empezó como un sueño ajeno” dijo Cristian, “al que nos incorporamos nosotros. La mente, Cecilio, se le ocurrió un día hacer algo y nosotros lo escuchamos como clientes de él”. Reconoció que los había entusiasmado, pero estaban ajenos a la participación. Hasta que un día lo llevó a Javier a la inauguración de una de estas plantas, “y mi hermano viene con la idea loca de hacer la misma planta acá en Suárez”.  

Expresó que les gusta emprender, que son parecidos a la familia De Souza, “siempre para adelante, por eso nos incorporamos a ese sueño loco que hoy estamos haciendo realidad”. 

Javier se refirió al tiempo transcurrido entre concretar la idea y verla en los hechos, que les demandó un total de cinco años: “Parece poco tiempo, pero muchísimas cosas pasaron entre medio. Se construyó en un contexto muy complicado, apenas empezada la obra nos toca esto de la pandemia. Con 60 personas trabajando, controles, barbijos, gente contagiada. La verdad que la pasamos mal. Hasta en un momento les afectó el barco que se había encallado en el Canal de Suez, no dejaba que lleguen los containers a la Argentina. ¡Más difícil no podía ser!”.

En un emprendimiento entonces que fue puesto a prueba continuamente, en todo el proceso de su desarrollo y puesta en marcha, la verdad que vale la pena valorizar esta obra que se enfrentó a muchos desafíos, “que se fueron sorteando y que, gracias a Dios, hoy estamos viendo esto que pudimos lograr”. 

Sintetizan el innovador proceso que implica esta planta en “la transformación de un deshecho en gas y, ese gas, transformarlo en energía para poder aprovecharla”. Se trata, en definitiva, “de una economía bien circular y bien 360 grados. Porque después de todo de este proceso termina saliendo un biofertilizante que lo podemos aprovechar en nuestros campos y, de esa manera, volver a producir alimento para volver a iniciar la cadena. Es absolutamente, totalmente, 360, no se desperdicia nada”. 

Cecilio, celebrando el acontecimiento que sus socios hablen, aportó que el alimento “es totalmente orgánico, libre de antibióticos, con enzimas que hacen que fermente el alimento que genera, a su vez, mayor gas metano en los biodigestores”. 

En el cierre de la entrevista, las frases que sintetizan la emoción de un día histórico para las familias que están en este emprendimiento, pero también para el Distrito, la Provincia y el país. 

“Casi que no puedo hablar, porque estoy muy emocionado -dijo Cristian-; hoy llegué a las 6.30 de la mañana, me paré en la tranquera y mandé una foto a un grupo que tenemos nosotros. Dijimos ‘hoy es el día, después que nos costó tanto’. Hoy es el día que podemos inaugurar esto y la verdad que siento mucha emoción”. Destacó que se consolidó un grupo muy bueno de trabajo, entre “uno que tiene una idea loca y otros que las queremos hacer. Así que venimos muy bien”. 

Cecilio De Souza destacó “la constancia, creo, es la virtud que más nos describe. Es eso, ponerse un horizonte, plantarse un objetivo e ir tras ello, cueste lo que cueste. Con los palos en la rueda que tengamos. Nos costó casi seis años, pero lo logramos”. 

A su turno, Javier Haack agradeció la entrevista, la difusión que ha permitido que esto se conozca “y que ayuda que se vaya contagiando la gente, y que cada vez seamos más tratando de cuidar al medio ambiente. Hoy me siento emocionado, hoy es el día”.