Juan Manuel Bonnaterre cuestionó el Presupuesto 2026 y los aumentos impositivos tras la última sesión de prórroga
El concejal de la Coalición Cívica, Juan Manuel Bonnaterre, visitó los estudios de La Nueva Radio Suárez y analizó las repercusiones que dejó la última sesión ordinaria de prórroga del Concejo Deliberante, marcada por un intenso debate político, un fuerte acompañamiento de vecinos y la aprobación, por mayoría oficialista, del Presupuesto 2026 y la Ordenanza Fiscal Impositiva.
Bonnaterre calificó la sesión como “rara” y sostuvo que, si bien desde la oposición eran conscientes de la nueva conformación del Concejo que permite al intendente Ricardo Moccero aprobar sus proyectos, consideraban necesario dejar clara su postura. Señaló que “toda la oposición estaba de acuerdo en que esto no estaba bien” y remarcó que los propios vecinos manifestaron su disconformidad con las medidas tratadas.
Uno de los puntos centrales de su crítica fue el escaso tiempo que tuvieron los concejales para analizar el presupuesto y la fiscal impositiva. En ese sentido, afirmó que existe un hartazgo generalizado en la sociedad frente a políticas que, ante la falta de recursos, recurren sistemáticamente al aumento de tasas e impuestos. “Nunca se hace énfasis en achicar los gastos, siempre la solución mágica es meterle la mano en el bolsillo a la gente”, expresó.
Al referirse al 2 % sobre los combustibles, Bonnaterre cuestionó los argumentos del Ejecutivo y aseguró que se trata de una tasa nueva y no de un desdoblamiento de tributos existentes, como sostuvo el intendente. Explicó que los fondos son de libre disponibilidad y que, aunque se anuncie un destino específico, el dinero puede ser utilizado para cualquier fin. Además, remarcó que la medida vuelve a dejar afuera a Huanguelén, ya que los vecinos de esa localidad pagarán el tributo sin ver reflejada ninguna obra. “Para cualquier huanguelenense, que le cobren 50, 100 o 1.500 pesos es caro si no se ve nada a cambio”, afirmó.
El concejal puso especial énfasis en lo que considera el principal problema estructural del municipio, que es la elevada cantidad de empleados. Indicó que cerca del 70 por ciento del presupuesto municipal se destina al pago de sueldos, una proporción que calificó como inviable para cualquier organización. Aclaró que no se trata de una crítica al trabajador municipal, sino al sistema de administración y a la falta de planificación que impide generar obras y mejorar servicios básicos.
En relación con la tasa de salud solidaria y la sobretasa vial, Bonnaterre sostuvo que el sector agropecuario no se opone a colaborar, pero sí a que se impongan aumentos que luego no se reflejan en mejoras concretas. Como ejemplo, mencionó deficiencias edilicias del hospital municipal y relató una situación que presenció personalmente vinculada a la falta de accesibilidad para pacientes con movilidad reducida.
Durante la entrevista también se refirió al pedido de repudio que presentó en el recinto por declaraciones del intendente, al considerar que fueron inapropiadas y que podrían haberse subsanado con una disculpa pública. Lamentó que el bloque oficialista haya votado en contra de ese planteo y sostuvo que el rechazo institucional avala expresiones que generaron un fuerte impacto negativo a nivel regional y provincial.
Finalmente, Bonnaterre se refirió a los pasos que restan en el tratamiento de la fiscal impositiva y confirmó que el próximo 5 de enero se realizará la asamblea de mayores contribuyentes. Manifestó su expectativa de que se pueda revertir la media sanción y que el proyecto vuelva a comisión para ser revisado, especialmente ante aumentos que en algunos casos alcanzan el 500 por ciento. “Vamos a seguir insistiendo, no para oponernos por oponernos, sino para que se recapacite, se fijen prioridades y la plata vaya donde los vecinos realmente la necesitan”, concluyó.
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