Mariano “Lalo” Le Lan volvió a las aguas gélidas y trajo tres medallas del Mundial de Invierno en El Calafate
El nadador suarense Mariano “Lalo” Le Lan participó a principios de agosto en la Winter Swimming World Cup 2025, que tuvo como escenario el imponente Parque Nacional Los Glaciares, en El Calafate, reuniendo a deportistas de aguas frías de distintos puntos del mundo. Allí, entre temperaturas extremas que apenas superaban los 2 grados, Le Lan se dio el gusto de volver a competir tras varios años de ausencia y regresó a Coronel Suárez con tres medallas de plata.
“Fue una experiencia muy linda. Hacía años que no me tomaba vacaciones, así que me agarré unos días, viajé al sur, competí y también pude reencontrarme con amigos. Quería volver después de mi último campeonato en las aguas de Ushuaia”, contó en diálogo con La Nueva Radio Suárez.
El nadador recordó que no fue fácil retomar: “Estuve un tiempo parado. En 2019 tuve un cruce en el club y me hice a un lado, después llegó la pandemia y más tarde una lesión muy seria en el brazo derecho. Un mes antes de El Calafate me tuvieron que infiltrar para poder nadar. Por suerte salió bien y pude estar presente”.
Entre el hielo y la adrenalina
La competencia ofrecía diferentes distancias: desde los 50 metros hasta pruebas de 500 y 1.000 metros, además de la exigente “milla helada” (1.609 metros) que se nada con aguas de menos de 4 grados. “Estaba preparado para hacerla, ya había nadado dos kilómetros en aguas de 3,5 grados, pero Prefectura no la autorizó porque en ediciones anteriores varios competidores habían tenido que ser rescatados. Me quedé con las ganas, pero era comprensible: son condiciones muy extremas”, explicó.
Sobre la dificultad, Le Lan fue contundente: “Lo que más cuesta no es nadar, sino entrar al agua. Hay que cuidarse de que no entre líquido en los oídos ni en las antiparras. En pocos días bajé ocho kilos de tanto estrés y nervios. El cuerpo cambia increíblemente”.
Rivales de todo el mundo
La Winter Swimming World Cup contó con representantes de Rusia, Finlandia, Estonia, Canadá, Estados Unidos, México, Brasil, Chile y Argentina, entre otros países. “Ver a los rusos y finlandeses nadar fue impresionante. Ellos son velocistas, especialistas en 50 y 100 metros, con físicos olímpicos. Pero en pruebas largas les cuesta porque no tienen la grasa corporal que nos ayuda a resistir el frío. Esa diferencia se nota mucho”, destacó.
El suarense también remarcó el alto nivel de la organización: “Después de cada serie había cardiólogos que nos revisaban corazón y pulmones, y saunas preparados para la recuperación. Es otro mundo”.
El resultado y el futuro
A pesar de los contratiempos —perdió el primer día de competencia por un problema médico y luego otra jornada fue suspendida por mal clima—, Le Lan logró subirse tres veces al podio: segundo puesto en 200 y 500 metros el viernes, y otro segundo lugar en los 100 metros el sábado. “Me cargaban los compañeros porque parecía que había ido a pasear, pero estaba tranquilo. Lo importante era volver a nadar en aguas frías y disfrutar”, resumió.
Ahora, el objetivo es seguir entrenando en el arroyo de la zona y en la pileta climatizada, con la ilusión de representar nuevamente a Coronel Suárez en el próximo Mundial. “En marzo 2026 se hará una edición en Finlandia. Los costos son altísimos, pero las ganas están. En el Calafate se habló incluso de que Argentina sea sede en 2028 en el glaciar Perito Moreno, lo que sería histórico. Ojalá podamos estar”.
Antes de cerrar, “Lalo” Le Lan agradeció a quienes lo acompañan en esta aventura: “Mis viejos siempre están, Eduardo Segui que me da una mano enorme, el doctor Rogelio Urizar que me atiende cada vez que lo molesto, mi entrenador Joaquín Gotfried y los amigos que alientan de cerca o de lejos. Solo no se puede y este deporte exige mucho”.
Con humildad y pasión, el nadador suarense volvió a poner a la ciudad en el mapa de una disciplina tan dura como fascinante, donde la fortaleza física y mental se ponen a prueba en cada brazada bajo el hielo.