Ciclismo: Martín Arzadún se coronó primero en su categoría en una carrera en la Patagonia Argentina

El suarense participó del Gran Fondo Siete Lagos, una competencia de ciclismo que reunió a tres mil deportistas de todo el país en un trayecto que abarca 110 kilómetros y bordea un paisaje maravilloso que se extiende por los lagos Espejo, Correntoso, Escondido, Villariño, Falkner, Machónico y Lácar.

Fue ésta la 13° edición de la carrera que es un ícono para los amantes de este deporte e impuso algunos obstáculos climáticos para quienes participaron y debieron enfrentarse al frío y las lluvias, tanto así que muchos de los competidores debieron abandonar a mitad de camino, algunos incluso con hipotermia.

Arzadún hace unos cuantos años entrena en nuestra ciudad de la mano del grupo de Freddy Biagioli, yendo al Balneario Municipal y haciendo viajes por distintos puntos del país: “Es una de las carreras con distancias largas que se hacen en distintos lugares de Argentina. Ésta es siempre en noviembre y corren bicicletas de distinto tipo en una ruta muy linda y con el detalle, en esta oportunidad, de que hubo una tormenta que nos acompañó desde el principio hasta el final” compartió el entrevistado, quien comentó que él creía que era normal que la gente abandonara: “La lluvia estaba muy fría. No sé qué proporción de abandono hubo, pero veíamos pasar camionetas y combis con gente y bicicletas cargadas. Creí que era algo más normal, pero supe que fue algo de esta ocasión debido a la extrema condición del clima” compartió el suarense que, en casi cinco horas y media, completó el trayecto que lo colocó en el podio con un promedio de velocidad de alrededor de veinte kilómetros.

Consultado sobre qué representa para él este triunfo del fin de semana, dijo: “Somos aficionados en este deporte. Casi todos lo empezamos a hacer con cierta edad. Si observan la ruta que va hacia el Balneario es toda gente de los cuarenta años hacia arriba, que es la edad en la que todos, por algún motivo, empezamos a hacer bicicleta y lograr un podio es un aliciente, es alentador porque, como con cualquier actividad, cuando la empezas a hacer es robarle tiempo a otras cosas”.

Así, a modo concluyente, aseguró Martín Arzadún que el ciclismo resulta en una pasión que disfruta: “No es un esfuerzo de gusto. Existe el sacrificio, pero no hace la diferencia. Es decir, uno no busca sufrir, pero el hecho de que haya alguna dificultad lo hace bonito y queda el recuerdo marcado” cerró, no sin antes extender un agradecimiento a Freddy Biagioli y el grupo de ciclistas con los que comparte experiencias y entrenamientos: “Necesitas un grupo que te motive y ese grupo fue clave, por eso el agradecimiento es hacia ellos”.