Mercedes Resch, premio In Situ por su obra vinculada a las raíces del territorio

Es artista plástica y recibió el premio en la provincia de Córdoba, tras una invitación hecha por los espacios Isidoro y Cresteo: “Ellos viajaban al mercado de arte que se dio a principios de junio” contó la suarense premiada, agregando que participó con dos trabajos que son lienzos inmensos.

“Vengo trabajando con algunos desentierros, a partir de trabajar en la huerta y con las plantas” contó, describiendo que busca “desenterrar parte de la historia, encontrando tesoros como engranajes, que el tiempo no ha podido disolver”.

En esa línea, contó Resch que hace tiempo trabaja con alambres, herramientas, engranajes y maquinarias “que en algún momento han servido para hacer actividades rurales” dijo, explicando que el resultado de todo ese trabajo ha dado por concluyente su obra, un impreso orgánico de esos pedazos de herramientas que dio por nombrar “Sudario de la Pampa argentina”. 

En esa línea, reconoció que su interés está puesto en reconocer y conocer qué fue de la historia y el trabajo de quienes nos dieron la vida, y se suma a un texto que ella misma escribió vinculado a esos desentierros: “Son procesos y búsquedas que a mí me ayudan a pensar y escribir” expresó, asegurando que cuando la llamaron para notificarle la premiación quedó “totalmente sorprendida”. 

Consultada sobre lo antedicho, la entrevistada reflexionó: “En Cura Malal, la gente en la época de mis padres enterraba las cosas en el patio, no sacaba la basura. No era una época en que hubiera mucho plástico y esas cosas quedaban enterradas. Entonces, cuando hago un pocito en La Tranca, encuentro tesoros” dijo, recordando que todos los años, cuando ella era niña, se abría un nuevo pozo: “El trabajo es un lienzo muy grande que envolví durante mucho tiempo y me daba mucho pudor enviarlo porque estuvo debajo de los árboles y le pasó la lluvia, el viento, el invierno, el caballo, las gallinas, los perros, el barro, todas piezas que quedaron en el trabajo, pero evidentemente éstas huellas eran parte”. Y reconoció que “uno no va a obtener una tela perfecta cuando está buscando por otro lado, pero ese resultado, que también se rasgó de tanta humedad que tuvo, fue entregarme a la experiencia de que le pase lo que le tenga que pasar” cerró Mercedes Resch.