20/06/2020CULTURA

Arte desde la virtualidad.

Docentes, alumnos y particulares disfrutando de las realizaciones artísticas que cobran vuelo en las redes.

Sobre el particular entrevistamos a la artista plástica y docente Ana Lucía Kleiner, para saber cuántas producciones están vehiculizándose a través de las redes sociales, y cuánto están trabajando en esto las escuelas.

“El arte, en estos momentos, nos está salvando un poco a todos. Y lo veo muchísimo en los adolescentes. La respuesta artística y virtual que estoy teniendo me lleva a reflexionar todos los días, a emocionarme, y a tratar de superar las propuestas. Porque la verdad es que están trabajando hermoso los chicos. Y están haciéndolo no solo para expresar sus sentimientos y emociones, sino muy centrados en lo que está pasando en la actualidad, que es lo que más me sorprende. He visto obras en las que han metido temas como el racismo, el coronavirus, la economía. Todo lo que está sucediendo a nivel social, político. Me emociona que una propuesta artística los pueda llegar a contextualizar de esa manera”.

Dice que esta virtualidad en las clases le ha permitido transitar “un paso artístico que estaba necesitando. Era lo que me faltaba. Porque a veces, en la escuela, no contamos con internet o con determinada tecnología que, hoy por hoy, la mayoría de los chicos en sus casas han logrado organizarse para tenerlo. Contar un rato con internet, con una computadora, tablet o celular a mano. Y las producciones están siendo no solamente artísticas, plásticas, sino también mucho trabajo digital. Ya más vinculado con todo lo que es el arte contemporáneo. Lo que pasa en la universidad, poder hacer visitas virtuales a museos, a galerías de arte. Nos ha permitido amplificar de una manera enorme los conocimientos artísticos”.

Una de sus propuestas está basada en Arte Efímero Contemporáneo, lo que ha sido tomado para diferentes espacios y propuestas. Explica Ana Lucía Kleiner que “el Arte Efímero viene a traer más preguntas que respuestas. Es un arte totalmente desestructurado y viene a salirse de lo que era el arte tradicional, encasillado en una hoja de papel, en una tela, adentro de un museo. Hoy en día vemos que el arte está en cualquier lado: en la calle, en una estación de tren, en las redes. Por otro lado, sumado a esto la renovación de las herramientas. Ya no hacemos arte, solamente, cuando agarramos un pincel y pintamos con un lápiz y dibujos. Hacemos arte efímero, tomando cualquier objeto que provenga de la vida cotidiana. Y con eso podemos hacer arte”.

Explica a sus alumnos, nos cuenta, que “con esto no estamos decorando, haciendo Art Atack, estamos haciendo arte. Y el arte tiene que tener un sentido simbólico, un concepto, una idea. En esto de las banderas, con arte efímero y elementos cotidianos, a mí me resolvió mucho el tema de las materialidades. Había chicos que me decían que no podían ir a comprar las acuarelas. Por eso les digo que no gastemos plata, tratemos de salir lo menos posible. En cada pequeño objeto que tenemos en nuestra casa hay una posibilidad para crear. El arte efímero dura un instante, y luego desaparece. Pero siempre queda el registro fotográfico, el registro por video. Lo que los alumnos nos están compartiendo con esas banderas, todo ese registro que pudieron tomar, con sus familias, en fotografías o videos, de esas construcciones simbólicas de banderas con elementos de la vida cotidiana”.

Ana Lucía cuenta, sobre la publicación que está en las redes sociales, de la Secundaria N° 4 de la Unidad Académica, sobre banderas virtuales que se hicieron la semana pasada, con los estudiantes del 6to año, que este año egresan y normalmente están a cargo de las efemérides. Se organizó una video llamada, con cada uno de los seis sextos años. 

“Los alumnos tenían que esperar la video llamada con objetos celestes, blancos y amarillos. De acuerdo a cómo me salían en la pantalla de la computadora, ubicados, les iba indicando el color que les tocaba y, con eso, hacía un registro fotográfico de bandera virtual. Esto es arte de acción en vivo”.

El arte, en las escuelas y en la vida particular, en expansión en estos tiempos de mucha virtualidad.