Día de la Tierra: “Tenemos que repensarnos como habitantes de este planeta”

“Esta es una fecha que nos invita a reflexionar en torno a los cuidados del medio ambiente y generar conciencia” expresó la funcionaria que, en principio, aseguró que continúan con las campañas de recolección itinerante de búsqueda de envases de fitosanitarios, de las que, hasta el momento, se desarrollaron seis, a partir de las que retiraron “más de seis mil envases”. Aunque, de acuerdo a relevamientos realizados desde el área de Ambiente, “quedan muchísimos bidones por juntar y disponer correctamente” indicó Graff, que anticipó que las campañas siguen diagramadas para llevarse a cabo.

Además, agregó que, a través de gestiones del Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS), Campo Limpio, el ámbito privado y la Municipalidad, junto a la Secretaría de Producción y el área de Ambiente, se consiguió la instalación de un Centro de Acopio de Envases, a construirse por una empresa privada. Contar con este espacio ayudará a disponer los envases y gestionarlos de manera adecuada.

Por otro lado, y enfocando la charla en el marco del Día de la Tierra, Magdalena Graff opinó: “Algo muy importante es repensarnos como habitantes de este planeta, corrernos de esta visión antropocéntrica de creernos los dueños del planeta y la especie más importante, y entender que somos una especie más dentro de millones y que tenemos que vivir en armonía, en equilibrio y protegiendo a lo que nos rodea, porque las especies de flora y la fauna brindan un montón de servicios ambientales y eco sistémicos que hacen posible la vida en el planeta para nosotros”.

Propuso ese concepto como medio para comprender “que cada uno, desde casa, puede generar pequeñas acciones para contribuir a estos cambios”, aunque reconoció que, “obviamente, el Estado tiene que acompañar con la implementación de políticas públicas, así como las grandes empresas, que también tienen que acompañar el proceso de protección”.

A partir de ese planteo, la Subsecretaria de Medio Ambiente local insistió en que, “cada uno, desde casa, puede hacer pequeñas acciones que tienen grandes impactos en la mejora ambiental” y retomó la técnica de compostaje con la que, aseguró, “estamos reduciendo entre el 40 y 50% de los residuos que generamos por día, que es un montón, porque si lo trasladamos a nuestro basural a cielo abierto, e imaginamos que todos, desde nuestra casa, hacemos compostaje, ese basurero se reduce al 40 o al 50%”. En ese sentido, indicó que, si todos se sumaran a esta propuesta de cuidado ambiental, “en lugar de tener un basurero tan grande, tendríamos la mitad”.

Explicó, sobre el proceso de compostaje, que se trata de “separar los residuos orgánicos de origen vegetal porque, en este proceso de descomposición de este material, en el patio de casa, vamos a tener abono natural para las plantas, así que tiene un doble beneficio”.

Consultada respecto de la actitud de los vecinos ante este panorama de concientización y cuidado del planeta que comienza a avanzar con fuerza, impulsado, mayormente, por organizaciones de protección ambiental y desde el Estado, Graff aseguró que “mucha gente está tomando conciencia de la importancia de la separación de los residuos y los impactos que esto tiene”. Aunque se adelantó y reafirmó que “queda un largo camino”. 

En esa línea sostuvo que, “quizás, la gente grande es la que más cuesta” y, en consecuencia, resaltó la relevancia del rol de las nuevas generaciones y el trabajo conjunto con las instituciones educativas, ya que, como dijo la funcionaria, “los jóvenes son los que llevan el mensaje de una manera súper clara, se apropian de él y son los que, muchas veces, retan a los papás, a los tíos, por no separar los residuos”.

Sobre el cierre, y a modo concluyente, Magdalena Graff hizo extensivo su agradecimiento a los vecinos por unirse en esta propuesta de separación de residuos y cuidado del medio ambiente, y agregó: “Es una práctica súper fácil y con dos tachitos nada más es posible. Realmente impacta, visualmente, mucho en la cantidad de residuos que quedan en nuestros cestos de basura, que después terminan en el basurero”.