16/09/2019CIUDAD

Como se pide. Por Germán Obando.

Hace más de dos semanas que me pasó algo de lo cual recién estoy recuperándome.

Me trajo muchos inconvenientes, pero gracias a Dios no hubo ningún herido.

Fui la víctima de los que hurtaron un auto y chocaron el pilar de la luz y la casilla de gas de mi casa.

A partir de este hecho se produjo un incendio que destruyó parte de la vivienda, tengo que agradecer que no fue la totalidad.

De todo esto lo que más rescato es la solidaridad de la gente, de los vecinos, mi familia y todos aquellos que me dieron una palabra de aliento o se acercaron a ver cómo estaba.

También tengo que reconocer el buen accionar de la Policía y Bomberos, quienes siempre estuvieron a mi lado apoyándome y conteniéndome en tan difícil momento.

No sé si gracias alcanza para expresar mi gratitud y reconocimiento, pero gracias a todos y en especial a una personita que lloraba pensando que me iba a quedar sin casa para dormir, un vecinito que me hizo acordar mucho a mi nieto.

Escribo esto porque siempre nos quejamos, de la Policía, de esto, de lo otro, y a mí me tocó sufrir un accidente sin tener nada que ver y sin embargo ellos trabajaron incansablemente para darme consuelo y una respuesta.

La respuesta quizá no es la que uno quisiera: “dos menores incapaces de hacerse responsables de sus actos, con padres que tampoco parecen hacerlo por ellos”, pero es una respuesta y estoy agradecido.

Soy un hombre de fe y voy a seguir adelante. Gracias.

German Obando 12.455.527.