03/07/2017SALUD

Interesante Jornada sobre Obesidad. Activa participación de la comunidad para una propuesta interdisciplinaria.

“Pudimos desarrollar el tema de obesidad con datos estadísticos”, consideró la nutricionista Daiana Frittayon quien explico cómo alimentarnos. La profesora Cecilia Heintz ofreció una rutina de Educación Física donde la gente se enganchó muchísimo y participó con alegría. La Dra. Diana Peralta resumió la jornada señalando que “la abordamos desde las distintas aristas que forman parte de un problema de salud, es decir desde la parte psicológica, funcional, médica, nutricional y educación física”. El licenciado en Psicología Marcos Weimann expresó su satisfacción por la gran convocatoria y la intensa participación de los vecinos que se “engancharon en la propuesta y se fueron muy entusiasmados con pensar en un cambio de actitud frente a la obesidad”. “Decidimos apostar a este tipo de jornadas y la verdad que la respuesta del públicos nos dejó muy contentos”, explicó la licenciada en psicología Débora Zaghet. “Presentamos una mesa saludable que pudimos compartir con los presentes, que les llamó mucho la atención porque habían cosas ricas y saludables”. Degustaron ensalada de frutas, budín de banana, brownie, budines con frutas y la gente se sirvió y comprendió que cuidarse en las comidas no significa que deban comer galletitas sin sabor o sólo tostadas, es decir que pueden comer rico y saludable.

El pasado sábado se llevó a cabo una jornada sobre Obesidad en el edificio del Mercado Municipal de las Artes organizada por la médica clínica Diana Peralta, los licenciados en Psicología Marcos Weiman y Débora Zaghet, la licenciada en Nutrición Daiana Frittayón y la profesora de Educación Física Cecilia Heintz.

Al finalizar la jornada sobre Obesidad el equipo interdisciplinario convocante mantuvo contacto con la prensa local, siendo la doctora Diana Peralta, quien en su disertación presentó ante la consulta una atractiva argumentación sobre el tema, con índices claros que mostraron la realidad de la población en cuanto a obesidad, quién puntualizó en dos parámetros: ¿De dónde venimos? y ¿Hacia dónde vamos?
“Fue muy positivo el encuentro y creo que superó ampliamente nuestras expectativas”, aseguró la profesional.

“Pudimos desarrollar el tema de obesidad con datos estadísticos” dijo la licenciada en nutrición, Daiana Frittayón explicando cuestiones que tienen que ver con la Nutrición, es decir cómo alimentarnos, después Cecilia Heintz brindo una clase de Educación Física donde la gente se enganchó muchísimo y participó con alegría, “así que estamos muy contentos y con ánimo para avanzar en nuevos proyectos”, señaló la profesional.

Al hablar de la Obesidad, la doctora Peralta definió que “lo abordamos desde las distintas aristas que forman parte de un problema de salud, es decir desde la parte psicológica, funcional, médica, nutricional y educación física”, señaló.

En este sentido, la licenciada en Psicología Débora Zaghet comento que la idea de llevar adelante la jornada surgió tras evaluar distintas cuestiones que les surgieron a cada uno como profesionales y la decisión fue “juntarse” para poder llevar adelante una jornada con un abordaje interdisciplinario, sobre todo “sabiendo que en la actualidad los mejores resultados en un tratamiento para la obesidad, son los que se realizan con el asesoramiento de un grupo de profesionales”, subrayó Zaghet.

“Decidimos apostar a este tipo de jornadas y la verdad que la respuesta del públicos nos dejó muy contentos”.

“Junto con Marcos Weiman trabajamos la parte más emocional y social ligada a la obesidad, por mi parte abordé la importancia del grupo, del apoyo y acompañamiento de la familia puntualizando que no solamente es necesario la concientización del paciente sino de todo el grupo familiar en el tratamiento de obesidad, como así también la importancia de la psico-educación”.

“Nosotros lo que planteamos es la necesidad de cambiar los hábitos y con ellos, un modo de vida, sobre todo en nuestras formas de pensar, ya que muchas veces distorsionamos la realidad; esto que decíamos, de encontrarnos, juntarnos en función de la comida, de festejar en función de la comida y que en la actualidad es socialmente aceptado”, destacó.

“Quizás el trabajo sea ese, tratar de modificar esos pensamientos y hábitos sociales, conductas que deban ser elaboradas y son tratamientos que llevan su tiempo, pero por eso también necesitamos metas cortas que se vayan cumpliendo de a poco para poder lograr el gran objetivo”, puntualizó la licenciada en Psicología Débora Zaghet.

La jornada también incluyó unos minutos de actividad física, fundamental en la búsqueda de una vida más saludable, que estuvo a cargo de la profesora Cecilia Heintz.

“Es importante que la gente tome conciencia de llevar a cabo actividad física en lo diario, si bien no resalté la ejecución de algún deporte o la necesidad de asistir a un gimnasio, sino primero avanzar en las acciones que organizamos cotidianamente en nuestros hogares”, señaló.

Lavar pisos, barrer, hacer camas, salir hacer mandados caminando, poder agacharse a buscar algún objeto, todo resulta favorable a la hora de moverse a conciencia por una vida saludable.

“Tratamos estacionar el auto lo más cerca del supermercado o comercio para caminar lo menos posible, y en realidad tenemos que buscar estrategias para que en la vida diaria hagamos ejercicios, agacharnos más, levantarnos flexionando las piernas, estirarnos, cuando lavamos los pisos o limpiamos vidrios, en esas actividades hacemos ejercicio y de a poco ir incorporando otros hábitos saludables como salir a caminar o andar en bicicleta, ponerlos como metas o propósitos, siempre haciendo algo que nos guste”, señaló.

La profesora de Educación Física coincidió con la licenciada en Psicología Débora Zaghet en afirmar en la necesidad de incorporar hábitos saludables y de cambiar la mentalidad de que la palabra “juntarse” esté relacionada con “comer”.

“Es necesario diferenciar cuando tenemos hambre y cuando comemos porque estamos aburridos o porque nos reunimos para comer, que es un mal general en la sociedad sobre todo en nuestro país”, destacó.

“La idea es mejorar nuestra calidad de vida con acciones sencillas y cotidianas que nos llevan, de a poco, a concientizarnos de la importancia de una vida saludable”, afirmó la profesora y agregó “es fundamental modificar las acciones diarias, dejar el auto y caminar, utilizar las escaleras y no el ascensor si vivimos en un edificio, a quien no le gusta en invierno mirar una película con un chocolate, si lo hacemos intentar medirnos y agregarle actividad física como forma de equilibrar”, concluyó.

Al hablar de “cambios de en los hábitos de nutrición”, la licenciada Daiana Frittayon insistió en la importancia del cambio de la palabra “dieta” por “hábitos”.

“La idea es ir de a poco y no pensar en todos los lunes comenzar a cuidarnos en las comidas” afirmó al hacer mención a la típica frase que tanta veces hemos escuchado “el lunes arranco la dieta”.

“Presentamos una mesa saludable que pudimos compartir con los presentes, que les llamó mucho la atención porque habían cosas ricas y saludables”, comentó y explicó “degustaron ensalada de frutas, budín de banana, brownie, budines con frutas y la gente se sirvió y comprendió que cuidarse en las comidas no significa que deban comer galletitas sin sabor o sólo tostadas, es decir que pueden comer rico y saludable”.

En tanto, y cerrando el grupo de profesionales que participaron de la Jornada de Obesidad, el licenciado en Psicología Marcos Weimann expresó su alegría por la gran convocatoria y la intensa participación de los vecinos que se “engancharon en la propuesta y se fueron muy entusiasmados con pensar en un cambio de actitud frente a la obesidad”.

“Estas jornadas son muy importantes para empezar a hablar de lo que nos pasa, poner en palabras esto de la obesidad que muchos la padecen y también la callan, como forma de desterrar mitos, creencias, analizar los vínculos familiares y aprender a aceptarnos tal cual somos y trabajar en la búsqueda de una vida más saludable y no tanto estética”.

Destacó la importancia de “pedir ayuda” haciendo un trabajo ya sea individual y en grupo para darse cuenta que no están solos en este camino.

“Con los alimentos tenemos un vínculo diario, por eso hay que aprender a alimentarnos de una forma diferente, ni mejor ni peor, con el objetivo de ir desterrando patrones culturales que nos lleven a estar mejor, acompañado de actividad física desde todo punto de vista”, señaló y puntualizó "es importante cambiar las prioridades, es decir, que en nuestra agenda diaria exista un ratito para ocuparnos de nosotros”, finalizó.

La interesante propuesta que se llevó a cabo durante la tarde del sábado con una activa y motivada participación ciudadana, concluyó con una exquisita merienda saludable.