18/11/2017MUNICIPALIDAD

Las irregularidades en obras de cloacas del Barrio Balcarce, de Santa Trinidad y en el tanque de agua del Barrio San Martín.

Hay denuncia penal ante la justicia de Bahía Blanca. Con técnicos del ENOHSA se implementaron inspecciones para confirmar el estado de las obras no terminadas y se comparó la documentación municipal con la presentada ante el organismo provincial. ¿El sistema?: “pedir más por menos y no hacer todo lo que se había pedido”. El tema involucra a los ex Intendentes Ricardo Moccero y Osvaldo Fuentes Lema y a los Secretarios de Obras Públicas Rubén Guarnieri y Leandro Graff. Conferencia de prensa del Asesor Letrado Municipal Cesar Elorriaga y del Secretario de Obras Públicas Ricardo Salerno.

Hace unos días atrás se registró la presencia prolongada, en más días de los previstos originalmente, de técnicos del ENOHSA, que recorrieron junto a funcionarios de Obras Públicas del Municipio de Coronel Suárez las obras de cloacas que están inconclusas, con irregularidades y que tienen una denuncia penal ante la justicia de Bahía Blanca.

Esta recorrida permitió a las autoridades actuales tener un minucioso detalle desde lo técnico y lo administrativo en torno a esas obras.

Para brindar detalles al respecto el viernes hubo una conferencia de prensa del Asesor Letrado César Elorriaga y del Secretario de Obras Públicas Ricardo Salerno.

En el principio de la conferencia el Dr. Elorriaga dijo que la misma tenía por objetivo “dar a conocer el resultado de las auditorías que realizó el ENOHSA, con la gente de la Secretaria de Obras Públicas,y también hacer saber que se ha ampliado la denuncia que originalmente hice, incorporando documentación de dos obras más, con el mismo sistema operativo. De pedir financiamiento por más metros de los que finalmente se contratan y en un caso con el agravante que ninguna de las certificaciones que constan en el expediente fueron comunicadas al ENOHSA, con lo cual el organismo, cuando estuvieron, nos dijeron que para ellos esa obra no existe, el convenio está dado de baja, no se acreditaron haber iniciado las obras. Con lo cual estamos un poco más complicados”. Estas dos nuevas obras que se sumaron a la denuncia inicial son: “la obra que se llama Barrio San Martín 1, para la que se pidió financiamiento por $2.600.000 y se certificaron $2.100.000, pero en el ENOHSA no se acreditó ni la firma del convenio ni se mandaron los certificados. La obra era para hacer en 120 días y en el término de 49 días llegó a certificar el 71% de la obra. Hoy por hoy el convenio en el ENOHSA está dado de baja. La otra obra es de Santa Trinidad, que también fue concertada con este mismo sistema de pedir más por menos y no hacer todo lo que se había pedido. Y también un estado de avance de obra que está a confirmar. En este caso existió un desembolso de 600 mil pesos sobre un total de $2.500.000”.

Los funcionarios del ENOHSA que estuvieron en Coronel Suárez también auditaron otras obras como el tanque de agua en el Barrio San Martín y otras obras de cloacas y agua corriente.

A su turno el Ing. Ricardo Salerno, Secretario de Obras Públicas, brindó un informe muy detallado indicando que hace quince días se está trabajando mucho en este tema, “y es necesario informar a la población que nos ha exigido el controlar y el estado de las obras”.

Desde el 2012 la Municipalidad realizó con el ENOHSA distintas obras por alrededor de 18 millones de pesos con el Municipio de Coronel Suárez, informó el funcionario.

Dijo Salerno que “salimos a auditar, a verificar uno por uno de los expedientes que obran en estas carpetas, donde están todas las características técnicas que desde el Municipio se había solicitado para ejecutar cada una de esas obras. El ENOHSA, cuando se recibía la información municipal de lo que se solicitaba, lo aprobaba y empezaba a realizar los desembolsos correspondientes. En el mismo momento la Municipalidad, a través de estos expedientes -señalando una pila de carpetas amarillas- contrataba en forma directa a las distintas empresas para poder realizar las obras”.

¿Qué es lo que encuentra el ENOHSA en la auditoría?, “que cuando la Municipalidad, por el mismo monto que había pedido el dinero al ENOHSA, contrataba a la empresa, el monto era el mismo, pero la cantidad de metros de obra en cuanto a cañería era significativamente menor. Eso habla a las claras de una sobre formación de precios, porque vos estás pagando un monto igual por menos cantidad de metros. Y que las certificaciones que el ENOHSA recibía de parte del Municipio a través de estos expedientes no se concatenaba con la obra”.

En el trámite de la auditoría se certificó con escribano notarial, se hicieron actas en cada una de las obras y cuadra por cuadra les preguntábamos a los vecinos si tenían obra, cuándo se había hecho y si funcionaba.

“Los vecinos, que gentilmente accedieron siempre, firmaban el acta notarial diciendo y contando lo que desde la Secretaría se le había informado a esta gente (del ENOHSA) el día anterior. Fue un trabajo bastante complicado. Pero contamos con buena predisposición de los vecinos, de la gente del ENOHSA y de la Municipalidad para empezar a desenmarañar esto, que con sinceridad es bastante complicado de entender y ver”.

Si bien la forma es básicamente la misma en cada expediente de obra, “cada expediente tiene su particularidad”, dijo Salerno, agregando que “tenemos que ver también que cada uno de estos expedientes estén con la contratación con los precios, y con la historia del expediente como corresponde, para ver si hay algún tipo de irregularidad entre el Municipio y la empresa. Cosa que al ENOHSA no le importa. A este organismo lo que le importa es que lo que le pidieron para hacer en tal lado esté hecho, si ellos mandaron la plata”.

Lo que se encontraron en la auditoría: “con obras de agua que son más antiguas y una de cloacas que es hasta el 2012/13, con obras de cloacas y de un tanque cisterna del 2014 al 2015. Las primeras hubo intervención de parte técnica del personal de planta de la Secretaría. Ahí hay ciertas incompatibilidades en la información que presentó el ENOHSA y que era firmada por funcionarios políticos de la Municipalidad, a su tiempo cada uno, llámese Secretario de Obras Públicas y llámese Ejecutivo. Cuando fuimos al lugar nos encontramos en las obras de agua corriente que, por ejemplo, en un 35% de las obras que se proponían para Santa Trinidad ya estaban hechas antes de que presentaran estos planos al ENOHSA. Un 15% de esa obra se hizo después del convenio, pero no hay registros contables que certifiquen que se hizo con la plata de este convenio. Y hay, como particularidad, muy rara, calles que no están abiertas donde se proponía hacer agua, como en la calle Magallanes y Cabildo Abierto, donde hay campo. Ahí la Municipalidad le había propuesto al ENOHSA hacer la obra y ni siquiera teníamos la calle. No obstante esas obras de agua, a través de estos expedientes, se hicieron en otro lugar de la ciudad, fundamentalmente en Pueblo San José (un 62%) y en Coronel Suárez (un 48%), lo que habla que en esos expedientes de agua corriente el único problema es las incompatibilidades técnicas de estos planos, que son horrorosas, y la ubicación distinta de la obra. Es decir, aquí no habría ningún tipo de certificación. Es decir, se pidieron 2 mil metros y se hicieron 2 mil metros pero en otro lado. Que está mal está mal, pero no se qué tipo de inconveniente acarrea eso, lo tendrá que evaluar el organismo nacional”.

En cuanto las obras de cloacas, “ahí sí nos damos cuenta que el problema era hacer por la misma plata menos cantidad de obras. Ahí es donde tenemos que ver qué cantidad de vecinos se quedaron sin poder tener cloacas por esa mala contratación por parte del Municipio, donde precios que había avalado el ENOHSA acá se distorsionaron”.

Dijo Salerno que “en este caso se está hablando de un 20, 25%, y en otros casos hasta un 40% de mayor precio que lo que el ENOHSA había resuelto. En cuanto a los tiempos entre la firma del convenio en el organismo nacional y la firma del contrato pasaron 90 días, en otros pasaron 120 días y en otros menos. En el medio no hay una situación económica perturbadora que pueda decirse que hayan sido uno de los problemas del asunto, que inclusive ni siquiera figuraba en los convenios. No haberle dicho al ENOHSA que esos convenios iban a cambiar de lugar ya forma parte de una irregularidad. Pero lo que nos preocupa también es ver si se hizo la obra y en qué condiciones están”.

Explicó el Ingeniero Salerno que “la obra que se hizo en el 2012 en el Barrio Balcarce está funcionando. La parte que no se hizo se realizó con fondos municipales. O sea, el plano que presentaron al ENOHSA se hizo completo, pero cuando vamos a los expedientes una parte se hizo con plata del ENOHSA y otra parte con plata del Municipio. Ahí existe la doble imputación, por llamarlo de alguna manera. Esta obra funciona”.

En la continuidad de la información de lo encontrado, el Secretario de Obras Públicas explicó que “cuando venimos al 2015 en adelante es cuando los problemas se empiezan a agudizar y a complicar cada vez más. La situación es la misma: pido para hacer por esta plata tanto y vengo acá y hago menos cantidad de obras. Pero parte de la obra nunca pudo ser usada. Solamente hay un pedacito en Santa Trinidad que fue usado, porque como vamos a hacer el pavimento hubo que hacer las cámaras para poder hacerlo. Es que se hacían las cañerías pero no se hacía la cámara, o no se hacía el colector. Ahora tenemos vecinos a los que les pasa el caño por la vereda y como la obra está inconclusa no podemos terminarla”.

Preguntándose en torno a si hubo un perjuicio económico para la Municipalidad, cosa que tendrá que determinar la justicia, informó que “estamos hablando de por lo menos 60 cuadras de cloacas con el tema de la diferencia de valores entre el convenio y la contratación. A 10 vecinos por cuadra son 60 familias. Hoy con los problemas de niveles que hay, donde todo el mundo está desesperado con el costo de vaciar los pozos sépticos, se podría haber solucionado del 2015 a la fecha un montón de problemas, si esto se hubiese hecho como correspondía y con transparencia”.

Reiteró que “en los expedientes del 2015 en adelante no hay ninguna firma de ningún empleado municipal técnico de planta de la Secretaria de Obras Públicas. Es más, el inspector de obra era el mismo Director o Secretario, cosa por demás insólita”. Indicó que el trabajo “tedioso, pero importante, es para que se pueda dilucidar esto”.

Se habló también de otra obra: “una cisterna importante que se hizo en Los Patos, para poder mejorar la red de abastecimiento de Coronel Suárez. En esa obra encontramos casi lo mismo, pero agravado: se pidieron 4 millones para hacer la batería de pozos (tres pozos de captación), la cañería hasta la cisterna y la cisterna con un montón de obras menores dentro de la misma, dentro del predio y el cerco perimetral. Acá se contrató por $800.000 más, a esos 4 millones, en forma directa a la empresa para hacer solamente la cisterna. En el expediente municipal tiene un avance del 91%, que no concuerda con el 91% del ENOHSA, pero ni siquiera concuerda con el 91% de la obra en la Municipalidad. Hubo economías de obra que equivalen a cerca de $800.000 que no se le descontaron a la empresa, que se le pagaron, porque solamente estamos debiendo $300.000 de los certificados, cuando hubo obras que no se hicieron. El proyecto decía que la cisterna era enterrada y se hizo semi enterrada. Decía que la losa del tanque tenía que ser llena y se hizo con viguetas y ladrillos sapos de telgopor, que no sabemos cómo va actuar el vapor del cloro ahí adentro con los ladrillos de telgopor. Estoy llamando a fábrica y me van a contestar por escrito a este respecto. Aquí se juntan temas técnicos, temas económicos y obviamente temas políticos. Yo jamás pensé que me iba a encontrar con esto. Pero hubo que tomar el toro por las astas y empezar a hacer el estudio, se hizo un muy buen trabajo con el ENOHSA, con los vecinos y la gente de Obras Públicas”.

Agregó que “dentro de las cosas casi irreales que tienen los expedientes municipales, en obras de 2, 3 y 4 millones, no hay un presupuesto por ítems de las empresas. Hay un papelito, una hoja A4 donde dice: ‘para hacer esto, cobro esto’. Pero no me dice cuánto cobra por cada ítem. Solamente nos tenemos que basar en el presupuesto municipal, que por lo general está hojas anteriores y que por lo general o coincide o tiene muy pocos pesos de diferencia con la oferta de la empresa que hizo la obra y que fue contratada en forma directa”.

Consultado en torno a qué funcionarios firmaban los avances de obra, que aparecen en el expediente, y qué empresas realizaron esas obras, con respecto a la obra del tanque de agua de Los Patos, dijo que “hay más deficiencia del lado del control municipal que de la empresa que propone hacer algo. Por ejemplo, el tema de si era enterrado o no hasta puede ser algo lógico, a pesar que yo no lo hubiera hecho así porque le va a dar mucho el sol. Pero si hay un ítem donde existe una economía tan notoria y tan real porque no se hizo el pozo, porque finalmente no se enterró, eso hay que pasarlo al expediente y no pagarlo”.

Agregó que los expedientes están firmados por los Secretarios de Obras Públicas y los Intendentes y algún Director de Obras Públicas que en su momento supo tener la Secretaría.

Está el ex Intendente Moccero, el ex Intendente Fuentes Lema, está el Ing. Guarnieri y el Ing. Graff. Son los funcionarios que están en el 100% de los expedientes.

“Y en cuanto a las empresas son cooperativas, por eso se la contrataba en forma directa. Una es la Cooperativa Trabycoop, que hizo la obra de Santa Trinidad, que no sobre certificó, al contrario, se le certificó menos de lo que hizo y se le debe plata. Y la Cooperativa de Vivienda de Coronel Suárez, que sí hizo la mayoría de las obras de cloacas y el tanque de agua. En otros casos son empresas chicas, cuasi unipersonales, que tienen labores que siempre vienen realizando para el Municipio en obras de infraestructura”.