15/08/2018CIUDAD

Lamentable estado de todos los alrededores del basurero y la planta de reciclado de residuos.

Un basurero municipal a cielo abierto extendido.

Bolsas de nylon, papeles, perros sueltos, una cava que estaba pensada para relleno sanitario y que no es más que un charco gigante donde se acumulan desperdicios. Un basurero municipal extendido.

Antes podía adivinarse o verse por las montañas de basura las aves que volaban bajo, el mal olor, las columnas de humo que dos por tres estaban dando cuenta de un incendio, pero que ahora ha avanzado, inexorable, hacia la zona del alambrado que separa la calle del predio que contiene el basural.

Y muchos perros sueltos, comiendo entre la basura. Los abandonados por sus dueños, no atendidos y a los que la Municipalidad les debe un lugar adecuado en el que estén mejor.

Los vecinos de las chacras lindantes al basurero a cielo abierto y a la planta de reciclado están cansados.

Quien se manifestó al respecto fue Juan Galbarino, propietario de una chacra en esa zona.

“Más que molestos y enojados estamos preocupados. Como vecinos de la nueva planta, a la que yo veo que están trabajando bien, pero no necesariamente con capacidad para la basura que traen. En este momento estamos como viendo que se agranda el basurero a cielo abierto para el lado de la planta. Antiguamente, el basurero estaba detrás del Cementerio, uno cuantos metros adentro, y hoy el basurero llega hasta la calle. Toda la basura, las bolsitas, siguen saliéndose por consecuencia del viento. Y ahora se agregan esos metros, que son 400 metros más o menos, entre el basurero y la planta, donde ya se está juntando mucha bolsa, mucha basura, en las cunetas. O sea, que ahora se nos está agrandando la basura. En el caso mío se acerca 500 metros más a mi casa el basural”, dijo a La Nueva Radio Suárez.

Se preguntó Galbarino, “¿por qué no ponen un cerco perimetral en la planta para que no se vuele la basura? ¿Por qué no ponen una red en los camiones para que no desparramen hasta la planta la basura? Son cosas simples de hacer; así como está, todo abierto, vamos a seguir juntando más basura todavía. Lo que queremos, los del barrio, es que no haya basura en la calle, porque si no el basurero se está agrandando para la calle, para la cuneta. Los vecinos tenemos que andar juntando las bolsitas para que el día de mañana no las coman una vaca o un ternero y se muera”.

En torno a los perros sueltos, “es todo un problema. Ayer a la mañana conté 22 perros desde la planta hasta el basurero. 10 estaban a la entrada de la Perrera y 12 a la entrada del basurero. En la chacra del Ing. Gustavo Pérez tuvieron cinco ovejas muertas por los perros. Tenemos que andar cuidando continuamente para que los perros no nos corran la hacienda”.