19/03/2023SALUD

Ley de Etiquetado Frontal: “Todo producto que contenga al menos un sello no puede ser distribuido ni comercializado en ningún nivel educativo”

Anahí Calvo es licenciada en Nutrición y consultada sobre alimentación saludable, particularmente en un nuevo inicio de clases, profundizó al respecto brindando recomendaciones para poder ser conscientes en la alimentación cotidiana de niños y adultos. 

En principio, recordó que las escuelas e instituciones están enmarcadas en la Ley de Etiquetado Frontal, por lo que no pueden brindar alimentos que tengan sellos: “Todo producto que contenga al menos un sello no puede ser distribuido ni comercializado ni publicitado en ningún nivel educativo en nuestro territorio” explicó, sugiriendo enviar a los chicos con viandas saludables a la escuela. 

Para ello, explicó que “una cosa es lo que se brinda desde lo atractivo, que muchas veces aparece a través de colorantes, aromatizantes, mucho azúcar, por lo que no puede establecerse una vara comparativa porque va a haber puntos difíciles de competencia”. En ese punto, extendió que debe apuntarse a reeducar los paladares a fin de prescindir de los productos empaquetados y aumentando el consumo de alimentos naturales: “Debemos poder competir con algo casero o artesanal que vaya dejando de lado las cantidades industriales de azúcar. Por ejemplo, será mejor que el chico consuma galletitas caseras, hechas en casa o compradas en la panadería, en lugar de las empaquetadas que venden en el kiosco” expresó, al tiempo que aclaró que, indistintamente de la cuestión del peso, “consumir esos alimentos genera malnutrición, niveles altos de colesterol y de azúcar, además de dependencia”.

En ese punto, refiriendo al consumo de azúcar en niños, explicó que hay cuestiones como el déficit de atención que se vinculan con ello y fue, en parte, lo que impulsó la promoción de la Ley de Etiquetado. En consecuencia, poder asistir a la escuela con colaciones caseras o naturales es la mejor opción.

Por otro lado, consultada por la nutrición de las personas en general, Anahí Calvo sostuvo que es un buen indicio que la Ley se haya dado, “porque invita a cambiar el perfil nutricional de lo que comemos. Puede ser una puerta de acceso para hacer una colación saludable, pero también para los adultos. Comenzar a consumir alimentos sanos en momentos adecuados, evitando los picoteos” dijo, recomendando -en caso de elegir llevar frutas- colocarlas en tuppers y rociadas con jugo de limón para evitar así que se oxiden.

Consultada, entre otros, sobre el consumo de uno de los alimentos de moda para los más chicos como es la pasta de maní, Calvo aconsejó leer los ingredientes de la etiqueta. Así, si sólo tiene maní, está aprobada, pero también existe la mantequilla de maní que se asocia a un montón de productos que no son saludables, como azúcares y grasas. 

En esa línea, la Licenciada en Nutrición expresó que un adulto que se maneja a través de una alimentación saludable se comienza, en general, a gestar en la niñez: “Los hábitos comienzan desde abajo, lo que no quita que haya adultos que hayan tenido una mala alimentación de chicos y puedan cambiarla. Nunca es tarde para cambiar los hábitos, pero debe saberse que lo que uno deje como semilla en la niñez será lo que siente las bases y modulará las formas en que su cuerpo manifieste diferentes posibilidades de tener, o no, una enfermedad”.

A modo concluyente, puso el foco en la relevancia que cobra la Ley de Etiquetado Frontal: “Permite que el consumidor tenga información, además de muchas otras cuestiones que regula. Lo principal es que uno sepa lo que está comiendo” indicó, invitando a comer cosas que realmente nutren y no comidas sobrecargadas de etiquetas negras.