17/10/2021SALUD

La importancia de cuidar las tres curvaturas del cuerpo humano: ¿una ayuda? Prestar atención al calzado que usamos y a su vida útil

Darío Duca, profesor de Educación Física, estuvo presente en los estudios de La Nueva Radio Suárez a fin de compartir información en una nueva edición del segmento Salud y Bienestar. En esta oportunidad: la importancia de los ejercicios cardiovasculares, que deberían ser 150 minutos semanales.

Además, el Profesor aclaró que tiene mucho que ver el estilo de vida de cada persona. Es decir, “¿cuántas horas estoy sentado, dando clases, frente a una pantalla, en una oficina, en un taxi o un camión?”.

En esa línea, Duca apuntó a extender un resumen necesario: “El cuerpo humano tiene tres curvaturas que tenemos que respetar. La primera es la cervical, que soporta el peso del cráneo, que pesa entre cuatro y cinco kilos”. En ese punto, marcó que un hombro sano hace que las cervicales estén bien, y recomendó hacer movimientos circulares con los brazos (como si estuviéramos nadando) para que se alivie el estrés.

Continuando la lista de curvaturas físicas, Darío Duca hizo mención de la segunda curvatura, que es la lumbar. Así dijo que se puede caminar, ir a zumba, andar en bicicleta, pero aclaró que “la segunda curva lumbar, si la persona tiene sobrepeso, todos esos kilos de más repercuten en la espalda”. 

De ese modo, está comprobado que los grandes problemas que se ocasionan son, entre otros, de riñones o de ciático. 

Finalmente, la tercera curva es el arco del pie. En ese punto, entra en juego la importancia del calzado que utilizamos: “Hay que tomarse, todos los días, aunque sea diez minutos para andar descalzos porque libera los dedos. Todo calzado aprieta y los pies, que soportan todos los kilos del cuerpo, necesitan liberarse, distenderse”.

A eso, Duca agregó una recomendación: “Pisar una pelotita de tenis todos los días. Con que lo haga veinte a treinta veces, alcanza”. Indicó que también puede ser con una botella de plástico, haciendo rodar el objeto. 

Tras todo lo antedicho, el Profesor de Educación Física hizo una aclaración muy importante, pero que, muchas veces, se subestima: “Necesitamos, para cada actividad física, un calzado diferente. No es lo mismo hacer danzas, jugar al golf o salir a correr” aclaró Duca, indicando que “la vida útil de la zapatilla es un promedio entre 800 y 1.000 kilómetros”, considerando la importancia del bienestar del tobillo, buscando evitar que se produzcan lesiones.

Entonces, si una persona camina, por semana, entre treinta a sesenta cuadras, en un año ese calzado pierde la vida útil: “Es un presupuesto en zapatillas, pero lo importante es que la plantilla o la zapatilla tiene que ser acorde al peso de cada uno. Hay que pensar para qué la vamos a usar”. 

Recomendó entonces, ver qué tipo de pisada tenemos cada uno: neutra -que es la que tiene el 70% de la gente-, supinadora o pronadora. Aconsejó, para darse cuenta, ver las suelas de nuestras zapatillas y su desgaste, aunque también puso el foco en hacer una consulta con un traumatólogo o un podólogo.