Atención de las adicciones en tiempos de pandemia

Esa es la pregunta que le hicimos a Viviana Adassus, que es la Jefa de ese Servicio, quien explica que “cuando comenzó toda esta pandemia empezamos a colaborar con el servicio de salud mental, con la atención telefónica de pacientes que necesitaban contención, atención psicológica. Así colaboramos de manera telefónica. Derivamos pacientes, y los que podíamos los atendíamos nosotros, que eran competencia nuestra. Y los que no los derivábamos a los profesionales correspondientes”. 

En algún momento se volvió a la atención presencial, en instalaciones que les habían prestado.

“Porque cuando comenzó la pandemia nosotros cedimos, solidariamente, las oficinas nuestras al servicio de recursos humanos del Hospital, mientras se terminaba la construcción de nuevas dependencias que estaba haciendo el Hospital. Cuando volvimos no habían terminado la obra, nos prestaron un lugar, donde atendimos un tiempo. Después, por diferentes situaciones que nos atravesaban a nosotras personalmente, que teníamos que ir aislándonos, volvimos otra vez a la atención virtual”. 

Por supuesto, “que no es sencillo, es difícil, para algunos pacientes cuesta más. Algunos no tienen la manera de comunicarse a veces, y otros necesitan la atención presencial. Lo estamos continuando y pensamos que, para fin de mes, si se cumple el plazo de obra, vamos a volver a retomar la actividad”, explica Viviana Adassus. 

Agrega que “tenemos todo el dispositivo y el protocolo para cumplir, así que esperemos que estén dadas las condiciones, poder retomar y hacer el traslado de nuestras oficinas a su lugar original, y empezar a atender como corresponde”. 

De todas maneras, se sabe que “hay muchos pacientes que no van a poder volver a la atención presencial por parte de las psicólogas del servicio, porque tienen patologías en tratamiento, por lo que no pueden circular. Esos pacientes van a seguir con nosotros vía telefónica”. 

Para el personal del área no es fácil, “porque debemos estar todo el día pendiente con el teléfono, para ver el momento en que las personas que son atendidas por el servicio se pueden conectar”.

Consultada si esta situación tan particular, que nos angustia, ha tenido impacto en el consumo de alcohol o drogas, responde que “en algunos pacientes sí. El hecho de no poder estar contenidos, de poder hablar más con su terapeuta, los afecta. A pesar que a veces se los llama dos o tres veces en el día, porque lo necesitan. Eso lo pueden contar mejor las psicólogas. Hay pacientes que se los llama todos los días, hay otros con los que hay comunicación dos o tres veces en el día. Llaman las profesionales o se comunican los pacientes. Hay pacientes que tienen un nivel de ansiedad muy alto y necesitan escuchar la palabra de su terapeuta, o que alguien los escuche”.