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19/04/2019 • RELIGION
Pastor Cristian Sept, de la Iglesia Luterana.
“Que en estas Pascuas podamos disfrutar de la entrega de Jesús”.
Hace unos pocos meses que está en Coronel Suárez el Pastor Cristian Sept atendiendo espiritualmente a la comunidad religiosa de la Iglesia Evangélica Luterana San Pablo, con sede en calle Ameghino, y deja su mensaje para esta fecha.
“Desde el Miércoles de Ceniza venimos reflexionando, todos los miércoles, sobre el camino de la cruz de Cristo. Conociendo cómo Jesús, el Mesías, el Salvador, se fue presentando a su pueblo, a su gente y lo que vendría a ser, y estaba en su tarea, en su misión en la tierra, hasta el momento crucial y puntual de la crucifixión y resurrección. En este camino, que Jesús ya sabía que iba a transitar, lo tenía pensado, Jesús el rey, el Mesías, el Humilde, vino a esta tierra con el objetivo de caminar hacia esa cruz que lo iba a exponer, y presentar a toda la humanidad.
En estas Pascuas es lo que queremos recordar y celebrar”.
El religioso consideró que “más allá que la cruz nos muestre el dolor y el sufrimiento de Jesús –es así y muchas veces no lo queremos recordar- es el que nos trae la victoria, el que nos trae vida y la salvación. Y a partir de allí si tristes porque el Mesías no va a estar más con nosotros, visiblemente, aquí en la tierra, pero sí gozosos y alegres que el Salvador se entregó por nosotros y lo hizo gratuitamente, voluntariamente.
Porque nos ama, nos quiere dar la salvación eterna. Y a partir de allí lo que siempre decimos es que esa cruz donde estuvo atado, parado, no pudo contenerlo. Tuvieron que bajarlo y salió de esa cruz, no de manera voluntaria, para luego sepultarlo. Y cuando parecía que todo se había terminado, es ese Jesús que una vez más vuelve a sorprender a toda la humanidad al resucitar. Es la certeza que como cristianos tenemos: el Mesías vino a este mundo, se hizo presente, murió, se entregó por nosotros. Y resucitó para darnos vida. Que en estas Pascuas podamos disfrutar de esa entrega de Jesús y celebrar esa salvación que logró en la cruz y en la resurrección”.
La comunidad de la Iglesia Evangélica Luterana San Pablo el jueves se reunió a las 20 horas, recordando la última cena de Jesús. El viernes, a las 9:30 horas, culto de Viernes Santo. El sábado Escuela Bíblica para los niños a las 10 de la mañana. Y el domingo, a las 9:30 horas, celebración el Domingo de Pascua.
“Desde el Miércoles de Ceniza venimos reflexionando, todos los miércoles, sobre el camino de la cruz de Cristo. Conociendo cómo Jesús, el Mesías, el Salvador, se fue presentando a su pueblo, a su gente y lo que vendría a ser, y estaba en su tarea, en su misión en la tierra, hasta el momento crucial y puntual de la crucifixión y resurrección. En este camino, que Jesús ya sabía que iba a transitar, lo tenía pensado, Jesús el rey, el Mesías, el Humilde, vino a esta tierra con el objetivo de caminar hacia esa cruz que lo iba a exponer, y presentar a toda la humanidad.
En estas Pascuas es lo que queremos recordar y celebrar”.
El religioso consideró que “más allá que la cruz nos muestre el dolor y el sufrimiento de Jesús –es así y muchas veces no lo queremos recordar- es el que nos trae la victoria, el que nos trae vida y la salvación. Y a partir de allí si tristes porque el Mesías no va a estar más con nosotros, visiblemente, aquí en la tierra, pero sí gozosos y alegres que el Salvador se entregó por nosotros y lo hizo gratuitamente, voluntariamente.
Porque nos ama, nos quiere dar la salvación eterna. Y a partir de allí lo que siempre decimos es que esa cruz donde estuvo atado, parado, no pudo contenerlo. Tuvieron que bajarlo y salió de esa cruz, no de manera voluntaria, para luego sepultarlo. Y cuando parecía que todo se había terminado, es ese Jesús que una vez más vuelve a sorprender a toda la humanidad al resucitar. Es la certeza que como cristianos tenemos: el Mesías vino a este mundo, se hizo presente, murió, se entregó por nosotros. Y resucitó para darnos vida. Que en estas Pascuas podamos disfrutar de esa entrega de Jesús y celebrar esa salvación que logró en la cruz y en la resurrección”.
La comunidad de la Iglesia Evangélica Luterana San Pablo el jueves se reunió a las 20 horas, recordando la última cena de Jesús. El viernes, a las 9:30 horas, culto de Viernes Santo. El sábado Escuela Bíblica para los niños a las 10 de la mañana. Y el domingo, a las 9:30 horas, celebración el Domingo de Pascua.
