“Si llueve en forma generalizada será una cosecha buena”

Estamos atravesando un período de escasez de precipitaciones desde la segunda quincena de enero y en lo que va del mes de febrero con (24 mm-lluvia oficial) acumulados.

Estaríamos necesitando una precipitación más generalizada para arribar a una cosecha buena a muy buena, pero si la sequía se prolonga en el tiempo, o las precipitaciones continúan por debajo del promedio para los meses de febrero y marzo, con lluvias similares a las la ultimas acontecidas en el partido de un promedio de 8 a 15 mm en la última madrugada de día lunes 22 de febrero, los resultados productivos de granos gruesos y pasturas, estarán comprometidos

Esto es lo que surge de una entrevista con el Ing. Eduardo de Sá Pereira, que es integrante de equipo técnico profesional del INTA Coronel Suárez.

“Los cultivos venían con buen crecimiento por las precipitaciones del mes de enero. Hay muy buenos maíces, con muy buen estado, el periodo de fechas de siembra fue escalonada, desde los más temprano a los más tardíos, por lo que algunos híbridos y dependiendo de su ciclo, se encuentran en etapas de floración, la cual podrían verse afectados por esta sequia estacional. Las siembras más tempranas podrían encontrarse en mejores condiciones con las precipitaciones ocurridas en el mes de enero, pero las más tardías podrían tener su periodo crítico comprometido.

También analizó que “los perfiles de suelo”, están necesitando una recarga importante de agua. Estas lluvias acontecidas de verano, se denominan lluvias convectivas (lluvias que se producen en determinados lugares), y están asociadas a bolsones de sequía importante que todavía perduran en la zona. Si bien, hay productores que han tenido la suerte de recibir estas lluvias que les han descargado un interesante de milimetraje. Pero, estas precipitaciones, han sido muy localizadas y en poca distancia disminuyen drásticamente su intensidad. Es el caso de Pasman, que ha tenido una muy buena precipitación, pero, saliendo de esa zona, el resto del partido está con déficit importantes de agua”.

Explica que “en el caso del maíz”, si no se producen lluvias oportunas en floración puede haber aborto de polen viéndose comprometida la fecundación, con lo cual se podría ver resentido los rendimientos.

En el cultivo de soja, estamos en el llenado de las chauchas y granos (periodo crítico para la soja) y ahí también se pueden ver disminuidos los rendimientos si no se producen lluvias abundantes. Más de un cultivar se encuentra en etapa crítica de llenado de chauchas”.

De todos modos, “los cultivos están con un estado de crecimiento bueno y muy bueno.

En el caso del girasol, “la mayoría de las plantas han superado su etapa más crítica, por lo que no vemos que haya mayores daños”, aunque se han tenido que hacer algunas aplicaciones para isoca medidora. En Huanguelen y Guaminí se están cosechando los primeros lotes. Se espera una muy buena cosecha.

Otra situación que se presentó fue el día sábado 20 de febrero, con temperaturas mínimas en casilla de 4 °C y 1,2 ºC a nivel del suelo (temperatura oficial). Hay maíces y sojas de segunda que se pueden haber visto afectados por las bajas temperaturas a nivel del suelo.

En resumen, dijo que esperan “una cosecha buena a muy buena, si de aquí en adelante se producen lluvias generalizadas y uniformes en su intensidad y distribución que estabilicen la expectativa de rendimiento”.