03/09/2020PRODUCCION

“Nos hemos adaptado, pero extrañamos mucho la magia de las ferias”.

Entrevistamos a Andrea Ruffa, que es artesana, profesora de artesanías y quien dirige un grupo de artesanos.

“Épocas difíciles, diferentes. Un año totalmente distinto. Nos hemos adaptado a otras cosas. Hemos perdido un poco la magia de las ferias, que era nuestro encuentro. Pero bueno, seguimos siempre trabajando y siempre creando. Nos mantenemos en contacto con nuestros clientes por redes sociales. Es como seguimos este camino. Difícil, pero siempre les digo que tengan fe, que pronto nos vamos a volver a juntar en nuestras ferias”, dijo en el comienzo de la nota periodística, hablando sobre cómo les va la vida a los artesanos en estos tiempos tan particulares.

¿Cómo ha sido la adaptación a estos tiempos? “A través de las redes sociales. Todas las manejamos hoy en día, es una manera de publicar, continuamente. La gente, por suerte, a nosotros nos conoce, sabe dónde encontrarnos. En los diálogos que mantenemos a diario en el grupo me comunican que siempre están trabajando, siempre están haciendo algo, porque la gente los llama, les manda mensajes. Es una forma de mantenerse activos”.

Claro que las ventas, en forma virtual, son un poco menores a lo que sucede en las ferias. Al respecto, Andrea Ruffa dice que “a la gente, lo que le gusta, es ir a la feria, vernos a todos juntos y apreciar lo que uno hace. Las ventas obvio que no son las mismas, se notan bajas. Pero lo importante es seguir”.

Con más tiempo libre, sobre todo al principio del aislamiento, ha habido como un retorno hacia aquello que alguna vez se aprendió. Además, con lo que implica realizar una creación manual, que ayuda a liberar estrés y tensiones.

En este sentido, Andrea expresa que “al tener tanto tiempo libre es como que nos encontramos con cosas que nos aprendimos hace mucho tiempo. A mí me pasa en el taller. Al estar tanto tiempo sin alumnos empecé a buscar otras cosas. La creatividad voló hacia cosas que hacía cuando era chica. Me reencontré con la cerámica, que era algo que yo había dejado. Yo estoy como siguiendo los pasos de Haydee Kleiner. Yo estoy haciendo sus placas, y en este tiempo de pandemia como que me reencontré con el barro, y también otras cosas. Yo me dedico más a la porcelana, a la madera, al mosaiquismo, que es mi fuerte, y había dejado de lado, a un costado, esto; ahora tuve un reencuentro con la cerámica, que era algo que yo había dejado”.

En estos días ha retornado la actividad presencial en el taller de Andrea Ruffa. Y todos los artesanos esperando el momento de la apertura total, para volver a las ferias, que tanto le gustan a la gente y también a quienes elaboran artesanías, para mostrar sus productos en vivo y en directo.