21/01/2022PRODUCCION

El senador David Hirtz solicitó, al Gobierno Provincial, medidas y decisiones que ayuden a solucionar la situación agropecuaria grave, producto de las sequías

David Hirtz es senador del espacio UCR-Juntos y presentó, en la Cámara Alta, una iniciativa parlamentaria solicitándole al Ejecutivo Provincial que arbitre las medidas necesarias para que se declare la emergencia o desastre agropecuario debido al impacto que la extrema sequía ha generado en el sector.

“Es público y notorio que este fenómeno climático que tuvimos los últimos días, con temperaturas por encima de lo habitual, sumado a la falta de lluvias, ha provocado, en muy pocos días, un daño muy importante que ya se venía insinuando por lluvias por debajo de lo normal” comenzó señalando Hirtz a La Nueva Radio Suárez. 

Continuó explicando que, en muchos lugares de la provincia, dicha situación climática ha generado graves problemas: “Veníamos haciendo un relevamiento y recibiendo de entidades agropecuarias, cooperativas agrícolas y entidades gremiales del agro, la preocupación por la situación de los productores” contó. 

El Senador continuó su relato explicando que “pertenecemos a una región que en esto es muy sensible porque, en general el sur y suroeste bonaerense, tiene una característica de suelo y de clima que lo lleva a que, cuando en otros lugares de la Provincia no hay problema, nosotros si los tengamos cuando hay déficit de agua”.

Todo lo antedicho fue lo que llevó a presentar una solicitud al Gobierno, esencialmente, para que ésto se haga rápido. 

Hablando desde su experiencia, David Hirtz dijo que se trata de “un proceso lento donde la Provincia comienza con la declaración, pero después hay un proceso local, y cada productor debe hacer una declaración jurada con sus daños particulares”. 

Fue entonces que señaló que la ley data de algunos años y es de emergencia agropecuaria. Una ley que, pese a haber buscado ser reformulada varias veces, nunca lo consiguió: “No resuelve el problema del daño que se le provoca a los productores, porque recién se comienza a contabilizar un beneficio cuando el daño supera el cincuenta por ciento. Hasta el ochenta por ciento se declara la emergencia agropecuaria, y recién superado ese porcentaje se lo denomina desastre agropecuario”.

Dependiendo entonces cada denominación, caben distintas asistencias: en la emergencia, el Estado Provincial prorroga impuestos impositivos, como los inmobiliarios rurales, por ejemplo. Pero, ante el desastre se da por anulado el inmobiliario y se posterga o elimina algún tipo de deuda, y prorroga pagos bancarios. 

Todo ello lleva, en la práctica, “a que los productores -que deben hacer la declaración jurada avalada por profesionales- terminen exagerando la información del daño que han recibido, para poder acceder a un daño más alto”.

Cuando ese beneficio llega, en general, el Estado no tiene destinadas partidas: “Nuestro país no se caracteriza por tener partidas presupuestarias que tengan previstas la posibilidad de afrontar éstos desafíos” explicó Hirtz, agregando que, llegada este tipo de situación, no está el recurso para la asistencia al sector: “Estamos poniendo sobre alerta que el Estado, a través del Ministerio Asuntos Agrarios, el Ministerio de Producción, los organismos técnicos como las chacras experimentales o el INTA, movilicen sus recursos técnicos y económicos para que la asistencia sea lo más rápida posible”.

Consultado sobre el porqué de las fallas en la búsqueda de renovación de la ley, el entrevistado describió que “los costos que hoy tiene el sector agropecuario para implantar son altísimos; los productos que hoy se requieren para trabajar el campo, en general, están valuados en dólares”. 

De todos modos, aseguró que “es de entender que, en una emergencia de ésta naturaleza, al Estado le resultaría terriblemente oneroso una asistencia total de un daño masivo que se produzca en una o varias provincias”. 

En esa línea fue que señaló que, “en países en que se ha logrado avanzar en cuestiones de asistencia al sector agropecuario, se ha ido por el seguro multi riesgo, que es un seguro que cubre todas las posibilidades de daño”. 

“Ésta ley vigente no resuelve el tema, es engorrosa y termina obligando al productor a tener que exagerar o mentir la cantidad de daño recibido” marcó Hirtz, señalando que “no es lo ideal, para nada”.

Sobre si será posible ser escuchados considerando que el actual gobierno ha tenido grandes desencuentros con el sector, el Senador dijo: “La idea de un seguro multi riesgo o de la instrumentación de mecanismos legales que permitan una solución más de fondo para las emergencias, exceden los tiempos incluso de éste gobierno y de los anteriores, que tampoco resolvieron el tema”. 

Si bien compartió su idea de que “no es amigable (el gobierno actual) con las problemáticas del agro”, sostuvo que “en algún momento hay que comenzar a trabajar en esto”. 

Además, contó que, tras haber tomado contacto con entidades agrícolas, sobre todo gremiales, “vuelven a insistir con éste tema. Es razonable porque tienen buenos trabajos hechos sobre la posibilidad de implementación de éstos seguros”. 

Agregó que “hay que concientizar a quienes toman al campo como un sector de recaudación, no de tener que asistirlo”.