20/05/2020INSTITUCIONES

Preocupación en la Liga de Madres por el sostenimiento de la Guardería y el Jardín.

Trabajando intensamente con la ropería, una de sus fuentes de ingresos.

En estos tiempos, donde el invierno obliga a renovar el guardarropa, cuando se han reducido mucho las economías de todos y porque sigue en vigencia la onda de lo usado o segunda mano, la ropería de la Liga de Madres de Familia está con muchas ventas. Le viene muy bien a la institución, cuando en el marco de aislamiento social se han reducido a cero la posibilidad de hacer eventos.

Consultada Gabriela Boudou, Presidenta de la entidad, dijo que “es un recurso muy importante para nosotros. Estuvo cerrado un tiempo, hasta que nos habilitó con el rubro indumentaria. Abrimos tres veces por semana, al principio, y ahora ya volvimos a sus días habituales. Martes, miércoles y jueves, y, además, le agregamos el día sábado, como para hacer un poco de feria americana y poner algunas otras cositas que hemos ido juntando. Ya que no podemos hacer las ferias americanas”.

Por supuesto, entonces, que “es un recurso muy importante para la Liga y le sirve a la población, porque puede encontrar ropa en muy buen estado a bajo costo. Es un ida y vuelta”.

Dice que “todo el tiempo está entrando mucha ropa. Mucha gente se ha dedicado a ordenar placares, más en este tiempo, así que entra un montón de ropa, todas las semanas”.

Sobre la situación económica, hoy, para la institución que atiende y tiene bajo su responsabilidad la Guardería y el Jardín Hijitus, dice que “sigue siendo delicada”. 

Esta situación no obedece a la pandemia, ya que “desde el año pasado veníamos arrastrando una situación complicada. Gracias al esfuerzo de muchas donaciones. Nosotras hacíamos cuatro eventos todos los fines de semana, para poder sostenerla. Así pasamos el verano, que siempre es muy difícil. Y nos encontró marzo, iniciando las clases y viendo cómo nos organizábamos, con todo esto, que realmente nos encontró en una situación catastrófica. Porque no pudimos salir a hacer los eventos. El cobrador de socios tampoco podía salir, la ropería estaba cerrada…”.

Frente a esta situación la solidaridad de la gente. Así lo cuenta Gabriela Boudou: “recurrimos a las donaciones, y nos ha ido muy bien. La gente de Suárez es muy solidaria con Hijitus, nos sorprendemos mucho. La verdad que hasta nos emocionamos. Porque con toda esta situación, tan delicada, uno tiene la sensibilidad a flor de piel”.

Dice que vieron “una lucecita chiquita”, porque pudieron incorporarse a los ATP, las ayudas que ofrece el gobierno, con el pago del 50% de los sueldos. 

“La realidad es que seguimos preocupadas, porque si bien fuimos aceptadas, todavía no ha sido depositado ese monto, así que esto es algo que seguimos esperando. Estamos esperanzadas en que llegue esta semana. Nosotros ya cumplimos con una parte del sueldo de las chicas, la semana pasada. Ahora estamos confiando en que esto se haga efectivo”.

Dice que “el sueldo del personal es la herramienta fundamental de Hijitus, para que siga funcionando”. 

El total del funcionamiento de Hijitus es, todos los meses, de 500 mil pesos. “De sueldos, solamente, son 250 mil pesos. Más las cargas sociales y todo el resto. Es una situación delicada”.

Agradecen también el apoyo de la Municipalidad: “queremos valorar el esfuerzo que está haciendo el Municipio, siempre escuchándonos. Estamos en comunicación permanente. Si bien todo lo que conseguimos son paliativos, en realidad, Hijitus lo que necesita es una ayuda de fondo, profunda, que haga un poco más sustentable esta obra. Ricardo Moccero está trabajando junto con su equipo para solucionar algunas cuestiones puntuales que tenemos. Como la suspensión de la sala de 4, el aumento de las becas. Son todas cosas que podríamos obtener y que también ayudaría al sostenimiento mensual”.

Y, por supuesto, a toda la gente que, con diferentes ideas y donaciones, se suman con su aporte, como la venta de crazas que realizaron a partir de una donación de hijuelos, o la venta de barbijos que llevaron a cabo otras dos mujeres, a beneficio de Hijitus, o la donación de papas de la Sociedad Rural.