04/12/2018ESPECTACULOS

Eros Alen Ruffa Cordone. Un suarense que inició una carrera apasionante.

“Soy un artista, este es mi trabajo, mi identidad y mi misión en el mundo”. Su último sueño cumplido. Quedó seleccionado entre los 70 bailarines que serían parte de “Argentum”, el espectáculo coreográfico de apertura del G20 en el Teatro Colon el viernes último, con la dirección y coreografías del prestigioso Ricky Pashkus.

Nos sorprendimos y nos maravillamos el viernes pasado a través de la Televisión Pública con la gala del Teatro Colón que presenciaron los 20 líderes del mundo que estuvieron en Buenos Aires deliberando en el marco del G20.

Fue más impactante todavía saber que un suarense, Eros Ruffa Cordone, hijo de “Palito” Ruffa, un nombre y apellido que pronunciamos muchas veces en nuestros informativos porque sobresalía de una manera u otra en los establecimientos educativos, cuando cursaba sus estudios en nuestro medio, en diferentes eventos.

Inmediatamente después nos enteramos que Eros Alen Ruffa Cordone formaba parte del impactante elenco de bailarines que tuvo a su cargo la apertura de “Argentum” en el Teatro Colón, nada más y nada menos, y que además era poseedor de una carrera que ya no se detendrá y que comienza a brillar una estrella que porta con toda humildad, sencillez, pero con un talento innato.

En comunicación con La Nueva Radio Suárez, Eros nos cuenta:

“Nací en Coronel Suarez, mi papá es herrero y mi mamá es auxiliar docente. Somos seis hermanos, yo soy el tercero. Siempre estuve conectado con el arte, mi padre es cantante y a la edad de 6 años pisé por primera vez un escenario y desde ese momento supe que era lo que quería hacer el resto de mi vida. A los 15 años vi una obra con una historia hermosa, contada a través del canto y la danza, una obra llamada West Side Story, y lo que más me sorprendió fue su protagonista, María, interpretada por la argentina Josefina Scaglione, ese día no solo descubrí el Teatro Musical, sino que, si trabajas por tus sueños, tus metas, estas se cumplen”.

“Fue por lo que siempre busqué, encontré y me inscribí en todas las clases gratuitas que pude, desde teatro, danza y música, en Patios Abiertos o la Escuela Municipal, incluyendo una clase de un seminario de ballet que tomé a mis 17 años con el dinero que había ahorrado trabajando como albañil y recepcionista telefónico. En Suárez participé de obras como Shrek, Buscando a Nemo, El Gato con Botas, que me inspiraron a mis 19 años viajar a Buenos Aires Capital con el apoyo de mis padres, en busca de todo eso que anhelaba, seguir creciendo”.

“Me otorgaron una beca para vivir en la residencia municipal estudiantil, gracias a mi buen rendimiento en la secundaria, que me permitió establecerme mientras estudiara una carrera de grado. No habiendo podido ingresar en ese momento a la UNA (Universidad Nacional de las Artes) y habiendo pasado todas las audiciones para las carreras de arte de las universidades públicas, elegí una carrera alternativa y comencé a estudiar Medicina Nuclear, que al día de hoy tengo aprobado dos tercios de la carrera. Ese mismo año comencé a ir en busca de mis sueños, fui a todas las audiciones posibles y logré el trabajo en una obra infantil (2014) Monsters – Personaje protagónico (Teatro La Mueca), la que me llevó a descubrir una escuela de la que el director de la misma se estaba graduando, Estudio PI, la que unos meses más tarde se convertiría en mi segundo hogar. Mi vida cambiaba segundo a segundo, realicé las audiciones para las becas de Estudio PI al mismo tiempo que audicionaba nuevamente para la UNA, esta vez logré entrar a la universidad, pero mejor aún, recibí el 100% de beca para estudiar en PI la carrera de interprete en teatro musical, algo que posibilitó mi formación, ya que de lo contrario hoy no sería quien soy. PI me formó como artista y como persona, deposité todas mis ganas en la carrera de 4 años que este mismo año estoy por finalizar. Tuve clases increíbles con excelentes maestros y pude mejorar mis habilidades y conformar el interprete que soy hoy en día, buscando mejorar cada día un poco más”.

“Entre tantas cosas más, llegó de la gran ciudad, directo desde Nueva York, el programa de becas del Joffrey Ballet School, para estudiar en el seminario intensivo de verano, con la presencia de Mathew Prescott. Tenía miedo, quería audicionar, no sabía si estaba a la altura, ni si podría viajar, pero no perdía nada con intentarlo. Audicioné, me otorgaron la beca, mi familia y amigos hicieron un esfuerzo enorme por ayudarme".

"Viajé en junio de 2017, volví con mi cabeza llena de nuevos conocimientos, viejas ideas reflotando, volví con ganas de más, con ganas de seguir creciendo, seguir aprendiendo, con ganas de volverlo realidad y es lo que intento hacer cada día. El año pasado fui becado nuevamente, pero por motivos económicos y de tiempos no pude viajar, pero este año, luego de un Workshop que realicé, me otorgaron nuevamente el 100% de beca en teatro musical y 75% en Jazz Contemporáneo, para los seminarios de 2019 de esta prestigiosa academia en la ciudad de Nueva York, algo que me emociona muchísimo”.

“En estos cuatro, ya casi cinco años, mi carrera profesional fue creciendo y creciendo, participé cantando en un programa de TV juvenil conducido por el Bahiano, trabajé en unos capítulos de una tira infantil -(2016) Heidi, bienvenida a casa - (Nickelodeon)- como bailarín con coreografías de Laura Roatta, pasé por el Teatro del Globo con ‘Borgia, el musical’ – Rol secundario (2016) y “C’est La Vie, de vos depende” – Rol protagónico (2017), participé en una obra de danza teatro llamada ‘Dónde mejor que en casa’ con Dirección y coreografía de Vivian Luz, y dirección actoral de Carlo Argento (Teatro del Abasto-2017). Este año tuve el placer de trabajar en el Teatro Astros en una temporada que duró desde mayo hasta agosto, que se extendió con una gira por el interior del país en el que tuve la suerte de pasar por mi pueblo, ‘Canciones del Zoo’, con la dirección del genio de Sebastián Irigo y coreografías de la hermosa Vanesa García Millán, todos estos años teniendo la maravillosa posibilidad de trabajar con tantos artistas de gran trayectoria y renombre, y para culminar, luego de una audición en la que pasaron 700 personas, quedo seleccionado entre los 70 bailarines que serían parte de ‘Argentum’, el espectáculo coreográfico de apertura del G20, con la dirección y coreografías del prestigioso Ricky Pashkus, con la colaboración de excelentes artistas como Juanjo Marco, Verónica Peccollo, Analía Guzmán, y otros, ni más ni menos que en el histórico Teatro Colón, una experiencia por lo demás inolvidable, excitante, que me deja pensando en muchísimas cosas”.

“Fueron, creo yo, pocos años en los que pasaron muchas cosas, que me hacen reafirmar que esta es mi carrera, que para esto estudio, me entreno y sacrifico cosas tan valiosas como el tiempo con mi familia, que esto es lo que soy y lo que quiero ser, que soy un artista, este es mi trabajo, mi identidad y mi misión en el mundo”.