14/06/2019DEPORTES

La absurda sanción a un DT-futbolista por solidarizarse con un pibe rival fracturado.

La Liga Regional de Coronel Suárez suspendió a Juan Emilio Calzetta, entrenador de juveniles y jugador de la primera de San Martín de Carhué.

Juan Emilio Calzetta juega en la primera de San Martín de Carhué y es el director técnico de la séptima división del mismo club. En un encuentro, en el que sus dirigidos enfrentaban a Club Sarmiento B de Pigüé, un jugador del equipo contrario sufrió una fractura.

En solidaridad con el niño y, en conjunto con el entrenador rival y el juez, decidió suspender el partido. La Liga de Coronel Suárez le dio por perdido el partido a ambos y le aplicó una sanción provisoria al entrenador-futbolista. Aún no salió la pena definitiva porque siguen estudiando el caso. Es por eso que se perderá la final ante Atlético Huanguelén, que debe jugar con su club el próximo domingo.

El futbolista de San Martín de Carhué viajó este miércoles pasado 100 kilómetros hasta Coronel Suárez para intentar revertir la situación en el Tribunal de Penas. Sin embargo, el panorama no es alentador.

"Está difícil, no creo que sea reversible (la situación). La Liga actúa con el Reglamento bajo el brazo", dijo Calzetta en diálogo con Clarín.

"Sé que todos los clubes de La Liga se están moviendo para que me saquen la sanción. Pero...", subrayó el DT-futbolista.

El Reglamento sostiene que el partido solamente lo puede suspender el árbitro. Y si bien la decisión la tomaron los dos entrenadores y el juez en conjunto, el encargado de impartir justicia señaló en el informe que solo fue obra de los directores técnicos.

"Es algo insólito, por más que el Reglamento lo avale. Me sorprendió. Yo, después de ese encuentro, jugué dos partidos (los cuartos y las semifinales) y la sanción salió más tarde", expresó indignado con tremenda injusticia el entrenador de la 7ma de San Martín.

Porque, además de suspenderlo por solidarizarse con el conjunto rival, la Liga lo castigó muchos días más tarde, privándolo de disputar el partido más importante: la final del campeonato.

De todos modos, Calzetta cree que hizo lo correcto y tiene el apoyo de sus dirigidos: "la totalidad de los chicos confirmaron que lo que hicimos es lo correcto. En el encuentro ellos consolaron a los rivales y al chico nuestro que produjo el choque. Todos estaban muy tristes y algunos hasta llorando", concluyó.

Fuente: Clarín.