Día del Escritor: “Hay que aceptar esta vocación con toda su carga y con toda su gloria”

Se trata de una fecha que se conmemora en homenaje al nacimiento del escritor cordobés Leopoldo Lugones, en 1874, establecido por la Sociedad Argentina de Escritores (SADE).

En principio, Chira contó que llegó a Coronel Suárez impulsado por tres razones fundamentales: “Mi desacuerdo con las políticas neoliberales de casi treinta años vigentes en mi país y que le han hecho mucho daños. En segundo lugar, por un gran amor. Me enamoré de una argentina. Además, en este país, en el contexto latinoamericano, se lee mucho, se escribe mucho”. 

Refirió, en ese punto, a la figura del autor peruano Mario Vargas Llosa, pero destacó que, “en Argentina, el mercado editorial y la cantidad de lectores es inconmensurable. Cualquier escritor latinoamericano quisiera estar en Argentina porque hay muchísimos lectores”.

En esa línea, Chira opinó que “la escritura literaria es una vocación. Es una voz interior que te llama por diversas y misteriosas razones”. Al respecto, sostuvo que “hay un momento en que tienes que tomar una decisión. Yo la tomé en 2001 y comencé a escribir con seriedad y responsabilidad porque creo que, detrás del escritor, hay una responsabilidad con la palabra, cuando no un compromiso”. 

A partir de ello recordó su primer libro, publicado en 2004, que estuvo inspirado por un hecho histórico que al autor entrevistado conmocionó particularmente: la caída de las Torres Gemelas de Nueva York, el 11 de septiembre de 2001. 

“Para un escritor como yo, vivir, experimentar y lanzarse a la aventura de la vida, este viaje difícil cuyos riesgos es necesario afrontar para avanzar, es muy importante. Para mí, vivir y escribir es lo mismo. De hecho, la literatura, en mi opinión, es una forma muy poderosa de entender y experimentar el mundo. Mi pensamiento, mi mente, mi corazón, mi cuerpo entienden y experimentan el mundo a través de la literatura” reflexionó Chira que, rápidamente, advirtió que “depende de cada escritor”. Aunque insistió que, en su caso particular, la literatura “es una forma de ver y de experimentar el mundo, distinta de otras actividades del arte o profesionales”. 

Chira profundizó en la posición actual en que está el escritor: “Mi posición social es muy marginal. Son muy pocos los que alcanzan el relumbrón, el éxito o la fama. La mayoría de nosotros escribimos en la pobreza, en la necesidad. No vivimos de nuestros libros”. Pese a ello, el Escritor marcó -en ese escenario- una ventaja: “A diferencia de otros profesionales, tenemos la libertad de expresión genuina. Podemos decir lo que queramos porque nuestra autoridad no nos las da una institución, no dependemos de una institución, somos autónomos”.

Así, apuntó: “Tenemos esa libertad de expresión que, incluso, no pueden tener los periodistas ni los profesores, sacerdotes o militares”. 

Sobre la conclusión del proceso de creación de una obra literaria, Israel Chira aseguró que advierte un cierre con la lectura de las personas: “La literatura es un diálogo y hay en todo acto de habla una condición dialógica. No se escribe sólo para uno mismo, sino para dialogar con la comunidad y, en ese sentido, los escritores escribimos para que nos lean, para que aprecien nuestro trabajo, para movilizar emociones, sentimientos o expresar una subjetividad. Pero siempre el diálogo es importante y, si entendemos esto, hay que aceptar esta vocación con toda su carga y con toda su gloria”. 

Agregó la importancia de comprender que un escritor puede ser “la voz de los que no tienen voz o expresar aquello que las personas, por diferentes obligaciones que tienen para ganarse la vida día a día, no pueden expresar con sus palabras”. 

A modo concluyente, Israel Chira describió: “Somos artistas de las palabras”. 

Sobre el final, el entrevistado -consultado sobre sus proyectos a futuro- ahondó en detalles de su actividad, asegurando que se mantiene activo en las redes sociales “porque permiten tener un público que no teníamos y, generalmente, los escritores no tenemos acceso a los grandes medios”. Aseguró que se trata de una herramienta usada con el fin de que circulen las ideas, no para hacer dinero: “El mercado de libros es muy importante y tiene que recibir incentivo del Estado para que la gente pueda tener libros baratos. Los libros caros impiden la circulación de las ideas en general, del debate público de todos los campos”. 

‘Ficción y peste’ es un libro que Israel Chira publicará en unos tres meses y se compone de la recolección de notas culturales que ha publicado, desde mediados de junio de 2020, en un diario local: “Estas notas reflexionan sobre la importancia de entender a la ficción en general. Pero, en particular, a la ficción literaria como una herramienta muy importante y tan útil como las herramientas de los discursos científicos, porque las ficciones nos acercan hacia la realidad mucho mejor que otro tipo de discursos o relatos. Me dejan mejores enseñanzas las ficciones sobre la vida real y me comunican verdades más humanas y verdaderas que otros campos”. 

Actualmente, el Escritor continúa con el dictado de un Taller de Escritura al que invita a todos los interesados a participar. Se trata de un espacio bajo la modalidad virtual que cuenta con horarios flexibles. Para más información deberán llamar al teléfono 15 506387 o vía Facebook a Taller de Escritura Creativa/Israel A. Chira.