02/12/2021CIUDAD

Cobra vital importancia que los productores y asociaciones rurales tomen conciencia de llevar los envases fitosanitarios al Centro de Acopio

El presidente de Campo Limpio, Horacio Silva, y su director ejecutivo, Ignacio Stegman, brindaron una entrevista a La Nueva Radio Suárez. Fue para referir a la instalación del Centro de Acopio Transitorio (CAP) en el que invirtieron, para su instalación en la empresa Camagro.

En principio, Silva destacó el apoyo de la empresa Camagro, que describió como “muy importante”. Aseguró que se trata, para ellos, de una interacción entre las empresas, las autoridades provinciales, municipales y la empresa local, conjuntamente con los productores, rol que destacó, ya que el proyecto no resultaría si no fueran ellos quienes se acercan a depositar sus envases. 

Campo Limpio nació de distintas derivaciones, pero lleva más de cinco años funcionando como tal: primero Fundación, después Asociación y previamente había una agrupación que se llamaba Agro Limpio, que se fue transformando legalmente.

Hoy se trata de una asociación de más de cien empresas, que comercializan fitosanitarios en Argentina y que son casi el 90% del mercado de fitosanitarios del país. 

Consultado Ignacio Stegman sobre cuánto se ha limpiado de los campos, dijo que “muchísimo” y profundizó contando que, “en 2019, se recuperaron 236 mil kilos; en 2020, más de un millón. Es decir, multiplicamos cuatro veces y medio”. Además, agregó que este año ya están duplicando el número del año pasado y adelantó que anhelan, en 2022, llegar a cuatro millones de kilos recuperados.

Explicó, en esa línea, que eso se da así porque van incrementando la cantidad de provincias: “Hoy tenemos 16 provincias adheridas al sistema. También la cantidad de CAT, tenemos 43 Centros funcionando en todo el país” profundizó, anticipando que el próximo año serán casi cien Centros en Argentina. 

Resaltó también que “los productores, las asociaciones rurales y todos los actores se están concientizando de tener ésta herramienta a mano y poder lavar bien los envases y devolverlos en un Centro de Almacenamiento”. 

Explicó que la concientización es un proceso que conlleva cambios de hábito, pero destacó que “va ocurriendo y mejorando”. 

En ese punto, los entrevistados fueron consultados respecto de dónde estaban esos residuos, previo la instalación de este CAT: “Hay todo un mundo de eso. Hay entierros, hay quemados en la ruta, tirados. Hay un mercado ilegal que compraba plástico” enlistaron, poniendo el foco en que “éste Centro viene a solucionar ese problema”. 

Explicaron que éstos bidones se reutilizaban, pero ilegalmente, “porque el uso de un bidón tiene ciertas restricciones por normas nacionales y provinciales, que dicen que son sólo para aquellos que no tengan que ver con un contacto con el ser humano, como accesorios en la ruta, como lomos de burro”. 

Explicó Horacio Silva que “está establecido en la norma nacional, en la ley N° 27.279, que estipula cómo tienen que ser los Centros de Almacenamiento, qué se puede hacer con ese plástico y se asegura que éstos envases, al ser reciclados, sea en usos adecuados”.