01/04/2017SALUD

Los controles y los cuidados para prevenir el cáncer de colon.

Cada 31 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Colon.

Consultada la Dra. Esther Hurtado, médica especialista en gastroenterología, explicó que “este día lo usamos para hablarle a la población e informarla sobre esta enfermedad”.

Destacó que se trata de una enfermedad frecuente: “es el segundo tumor más frecuente después del cáncer de mama y el segundo en causa de mortalidad. Otro dato importante es que la mayoría de los casos se producen en personas que no tienen antecedentes familiares. El que tiene antecedentes familiares pertenece al 25% de los casos de cáncer de colon. Los que tienen antecedentes generalmente consultan. El 75% restante corresponde a personas que no tienen antecedentes familiares. Es un tumor que no da síntomas. Cuando aparecen ya estamos en una fase avanzada de la enfermedad”.

Son síntomas la anemia, pérdida de peso, cambio en el hábito para ir de cuerpo y sangrado visible en materia fecal.

“Esos síntomas, cuando se detectan, es probable que se esté en una fase avanzada de la enfermedad. Pero también pueden deberse a otras patologías. En las fases tempranas el cáncer de colon no presenta síntomas”.

Por eso es sumamente importante la prevención. Sobre el particular la Dra. Hurtado menciona que “conocemos la lesión precursora, esto es cómo arranca un cáncer de colon. Es con un pólipo. Es una lesión en la pared interna del intestino, que es una malformación de las células que están en la pared interna del intestino. Eso empieza a crecer, tiene un crecimiento muy lento, alrededor de 10 años. Por lo que hay bastante tiempo para detectarlo, extirparlo a tiempo y cortar la vía hacia el cáncer de colon. También en la fase temprana, cuando está en la pared interna del intestino y todavía no se ha extendido hacia todo el intestino o hacia otros órganos, tiene un 90% de curación”.

Recordó la importancia de la prevención primaria: “llevando una vida sana, comiendo muchas frutas y verduras, evitando el tabaco, el alcohol y haciendo ejercicio. Eso es una prevención primaria para la mayoría de los tumores. Y hay una prevención secundaria, con el diagnóstico a tiempo. Todas las personas, entre 50 y 75 años, sin síntomas, tendrían que hacerse todos los años un test de sangre oculta en materia fecal. Se le debe pedir al médico, cuando va a hacerse controles generales; el bioquímico entrega un kit para extraer una pequeña muestra de materia fecal, guarda ese kit en la heladera y lo entrega en los próximos 7 días al bioquímico. Si es negativo se queda tranquilo y lo repite al año siguiente. Si es positivo, si hay sangre en el tubo digestivo, nos obliga a realizar un estudio más que es la colonoscopia” recomendó la profesional.

La Dra. Hurtado recordó que “hoy en día se usa un tubo flexible, que tiene en la punta una cámara y que permite ver minuciosamente toda la mucosa del intestino. Actualmente se hace con sedación, al paciente no le presenta ninguna molestia y es muy importante por lo que previene. Si se encuentra un pólipo, probablemente, se puede sacar con la colonoscopia, dependiendo del tamaño. Y si se encuentra un cáncer en estadio temprano se va a una cirugía y el paciente tiene un 90% de posibilidades de curación”.