07/03/2017JUDICIAL

Tendrán que responder en juicio por un caso de mala praxis en el Hospital Municipal de Coronel Suárez.

Falló el procedimiento de sedación de una mujer que iba a ser operada por la inflamación de la vesícula. Sufrió graves lesiones.

La Cámara Penal rechazó el sobreseimiento de una médica anestesióloga y su asistente, acusadas de un grave caso de mala praxis registrado hace 5 años en Coronel Suárez, y ordenó elevar la causa a juicio.

Se trata de la doctora Amalia Yolanda Kirchheim, de 67 años y oriunda de Posadas, y la técnica Ana Paula Bec, de 36. Ambas viven en Suárez.

Se les imputa no cumplir con el deber de cuidado al anestesiar a la paciente María Susana González, quien debía ser operada por una inflamación en la vesícula.

El hecho se registró el 3 de enero de 2012, entre las 20.20 y las 23.30, a poco de la intervención, que iba a estar a cargo del doctor Osvaldo Maldonado, en el quirófano 1 del Hospital Municipal de Suárez.

El fiscal Sebastián Floglia, a cargo de la causa, estableció que durante la aplicación de la anestesia a la paciente, y ante dificultades en la maniobra de intubación traqueal, las dos acusadas “no actuaron con la pericia necesaria” para lograr mantener la ventilación de las vías aéreas y la oxigenación de González.

Por ese motivo, la mujer -de mediana edad- sufrió una encefalopatía hipóxica, con severos daños a su salud, como invalidez, imposibilidad de caminar y hablar (solo emisión de sonidos guturales) y con pérdida de la visión, lo cual le generó una dependencia total para las actividades básicas de su vida diaria.

En la requisitoria de elevación a juicio de la causa -ahora confirmada por la Sala I de la Cámara, con los votos de los doctores Guillermo Giambelluca, Gustavo Barbieri y Pablo Soumoulou- se tuvieron en cuenta las declaraciones del marido de la víctima, Claudio Graff y otros familiares, así como los testimonios de médicos, enfermeros e informes periciales.

Los especialistas determinaron que la mujer sufrió un espasmo en el momento de la colocación de la anestesia y que la falta de oxígeno durante 3 o 4 minutos se produjo, supuestamente, por la imposibilidad de oxigenar bien a la paciente durante la intubación.

Para el fiscal, se trató de “una violación al cuidado debido por parte de las encargadas de aplicar la anestesia general, la médica anestesista y su técnica asistente, en el momento más importante y clave de su actividad: la oxigenación necesaria durante la maniobra de intubación. La forma en que se la intentó llevar a cabo resultó contraria a todas las reglas, guías y procedimientos acostumbrados”, sostuvo Foglia en el cierre de la investigación, postura que compartió la Cámara.

González fue intervenida sucesivamente en una clínica de Mar del Plata y en el Hospital Español de Bahía -colocación de una bomba de infusión de Baclofeno, que debe ser recargada y un botón gástrico y un catéter en la espalda-, también tuvo un tratamiento de rehabilitación en IREL, aunque sin resultados satisfactorios.

Entre otros informes sumados a la causa, figura una presentación del entonces intendente Ricardo Moccero, que da cuenta que Kirchheim estaba jubilada para el 3 de enero de 2012.

En ese sentido, confirmó que no tenía la matrícula vigente ni la certificación actualizada en la especialidad de anestesia.

Fuente: La Nueva.