15/02/2018CIUDAD

Día de San Valentín

“Está bueno celebrar esta posibilidad que nos da la vida, la de enamorarnos”, dijo la Lic. Silvia Menéndez

El miércoles fue un día para quedar bien?. Una oportunidad de pedir perdón encubierto frente a algún desliz?. Una ocasión para quedar pegoteado entre frases dulces y chocolates?. Los que no están enamorados, ¿se pierden San Valentín?

Para hablar del enamoramiento y el amor, más allá de San Valentín, consultamos a la Lic. en Psicología Silvia Menéndez.

“Creo que siempre es una oportunidad, celebrar y festejar. Convengamos que es una celebración, que como tantas otras se ha ido comercializando. Pero todos nosotros podemos replegarnos frente a estos hechos, como también puede serlo la navidad y ver cada uno de nosotros cómo lo vive. Se puede hacer preguntas acerca de ¿qué es lo que me enamora, más allá que me puede enamorar una persona puntual, también circunstancias, actividades, lugares me pueden enamorar. Si ampliamos la mirada, no es que va a haber alguno que se va a quedar por fuera, que si no tiene pareja no puede festejar. Creo que es un festejo que todos podemos hacer, y cada uno está enamorado de distintas circunstancias, más allá que de una persona. Creo que es válido. Cada uno tiene que bucear dentro de sí mismo y ver qué es lo que lo enamora”.

Pero atención, porque advirtió Silvia Menéndez, que “esos enamoramientos van cambiando a través del tiempo. Puede ser que a los 20 años nos enamoran algunas cosas o circunstancias, o personas; a los 30 otras, a los 40 otras, y a los 50 otras. Porque somos dinámicos. Si partimos de esta base, entonces, está bueno celebrar esta posibilidad que nos da la vida, la de enamorarnos”.

Destacó que “lo más importante es saber que tenés dentro tuyo, en tu espectro afectivo, la posibilidad de sentir que hay cosas, circunstancias o personas que te enamoran”.

Agregó la profesional que si nos centramos en que hoy (por ayer), es el día de los enamorados, hay que contemplar la idea que el enamoramiento es la primera fase de un proceso que después puede cuajar o no. es un proceso muy ilusorio, que dura meses, donde la intensidad emocional es muy fuerte y de alguna manera, nos humanos nos sentimos embriagados”.

Más adelante explica que “Toda nuestra psicobiología está afectada por una influencia hormonal muy alta, y esto es real, que cambia nuestra biología y nuestra posibilidad de ver las cosas. Si uno se metiera con una camarita, y fuera recorriendo el cuerpo de una persona que está enamorada, verías que hay un montón de influencias biológicas que están totalmente alteradas, que hacen que vos veas la vida totalmente diferente. Por eso, cuando hay alguien que está enamorado, uno se da cuenta, porque tiene un brillo especial en su mirada, sus gestos son diferentes, está abstraído en otra cosa, porque su cabeza y su sentir está atrapado por esta situación. Esa es una primera etapa. Después viene lo demás. Sobre eso, se construye el amor, o no se construye. ese estadía es maravilloso, uno permanece embriagado sin haber tomado nada”.

Ahora, pretender permanecer en este estadio no es lógico, aclara la psicóloga, “porque la construcción del amor es otra cosa, y lo que vos descubrís cuando construís el amor, son otras cosas, otras gestos, que te van a producir otras, sensaciones, pero no podes vivir en esta primera etapa eternamente. Porque además, no permitiría construir lo que viene luego. Sería como demasiado maníaco, no podríamos vivir de esa forma todo el tiempo. Lo cual no significa que no ames lo que vos elegiste y que en un primer momento te enamoró. Después amas. Primero te enamoras. Hay mucha gente que dice ´yo ya no siento lo mismo´, y no! no sería lógico! Ahora, te tendrás que preguntar si esto que sentís ahora es algo del orden del amor o del desamor, pero claramente ya no vas a sentir lo mismo, porque estás en otra fase, en otro período, en otra instancia”.

La construcción del enamoramiento hacia el amor, “es de construcción permanente y cotidiana. Porque vos y el otro, o esa circunstancia que te enamora, es dinámica, va cambiando. Entonces, hay que reciclarse todo el tiempo para poder sostener eso que estás construyendo, porque cambia. No es un objeto estático”.

Cerró la entrevista diciendo que “la gente no se adhiera a los hechos materiales. Que simplemente, si está enamorado de una persona o una circunstancia, que le dé un fuerte abrazo, que le diga que está y que está resignificando ese contrato. No es necesario interponer lo material. No viene mal. Pero como un gesto legítimo. El gesteo realmente legítimo es poner corazón a corazón con el otro, y decirle, yo estoy acá con vos todavía”.